Belloso declara que Banesto casi suspende pagos y afirma que Conde fue "desleal"

El ex consejero delegado de Banesto Juan Belloso, acusado de falsedades contables, declaró ayer que nunca tuvo problemas con el Banco de España y que éste le ayudó en agosto de 1993 a evitar la inminente suspensión de pagos del banco por falta de liquidez, como consecuencia de que el sistema bancario le retiró el crédito. Belloso dijo que no formuló las cuentas consolidadas de Banesto, pero admitió que está de acuerdo con el cierre del ejercicio 1992. Belloso expuso la otra cara de Banesto, la más sórdida, frente a la versión feliz de Mario Conde, a quien acusó de"desleal".

Mario Conde, Arturo Romaní y, quizá con menos energía, Ramiro Núñez fueron los arquitectos del "Banesto feliz y perfecto" ante el tribunal del caso Banesto. Ayer, esa imagen de perfección se rompió. Juan Belloso, consejero delegado del banco hasta el 31 de diciembre de 1992, dijo que se había marchado porque los poderes que le confirieron como delegado no le autorizaban ni a conceder créditos ni a decidir sobre el personal. "Era desconfiar de mí".Según explicó, a su sucesor, Enrique Lasarte, se le concedieron los mismos poderes que él tuvo. "Se le copiaron los míos", dijo. "Yo no hubiera sentido nada malo si a mí se me hubieran copiado los poderes de mi antecesor", ironizó. Su antecesor era precisamente Mario Conde, quien retuvo siempre de manera unipersonal todos los poderes delegados del consejo.

Belloso narró que nunca tuvo problemas con el Banco de España. "Nunca hubo problemas institucionales con el Banco de España", dijo, y agregó que Banesto estuvo a punto de suspender pagos en agosto de 1992, al sufrir una crisis de liquidez porque los bancos le cerraron las líneas de crédito en el mercado interbancario. "El tesorero de Banesto presentó al cobro un talón de 35.000 millones contra la cuenta de deuda pública que manteníamos en el banco emisor. Yo no sabía nada".

Banesto no tenía dinero en la caja. "Yo y el director financiero cogimos el coche, nos fuimos al Banco de España. El gobernador, Luis Ángel Rojo, actuó con total celeridad. Y así evitamos la suspensión de pagos", narró.

El fiscal Javier Sánchez Junco indagó por la extracción de 300 millones de la caja de Banesto, operación de apropiación indebida por la que se acusa a Conde. Belloso dijo que como ese pago contabilizado en Pamplona estaba gravando la cuenta de resultados, le preguntó a Conde si era un asunto de Martín Rivas, quien ordenó el pago bajo instrucción de Conde, o si era asunto del banco:

-Es un asunto del banco,según me dijo Conde -recordó.

Explicó que tanto Conde como Rivas habían tenido una actitud "desleal" con él en este asunto. "Por eso guardé los documentos referidos al pago y su contabilización", dijo. "Porque era una operación realizada al margen de la organización del banco", explicó al fiscal. Agregó a modo de ejemplo que un director regional prestó 25 millones de pesetas a un partido político y que quiso pasarlo por la comisión del banco. "No tenía que hacerlo, pero quiso compartir la decisión. El señor Conde no lo hizo".

Juan Belloso defendió las cuentas del ejercicio 1992, aunque no formuló las cuentas consolidadas.