Estados Unidos demanda a Intel por abuso de posición dominante y prácticas monopolistas

El Gobierno de Estados Unidos ha presentado una demanda contra la compañía Intel (primer fabricante mundial de microprocesadores informáticos) por abusar de su posición dominante y ejercer el monopolio para mantenerla. La empresa fabrica los microprocesadores Pentium, que constituyen el cerebro de nueve de cada 10 ordenadores. La Comisión de Comercio estadounidense acusa a Intel de ocultar información clave sobre el funcionamiento de sus productos para tener bajo su control a los fabricantes de ordenadores e impedir el desarrollo de la industria.

Tras la reciente demanda presentada contra Microsoft por el Gobierno federal de EE UU y 20 Estados de la Unión, se abre ahora otro litigio con otro de los grandes de la informática. El control que ejerce Microsoft con su sistema operativo Windows y el de Intel con sus Pentium II ha hecho que el sector se refiera a estas dos compañías como la pareja Wintel.La demanda presentada por el Gobierno acusa a Intel de impedir el desarrollo de la industria, al mantener en secreto buena parte de la información que sería necesaria para que otras empresas prosperasen en el mercado de la fabricación de microprocesadores para los ordenadores. A pesar de que la acción judicial tiene su origen en las reclamaciones hechas por dos pequeñas empresas (Intergraph y Digital Equipment), los analistas y los propios directivos de la compañía consideran que de esta demanda puede depender el futuro del sector.

Intel ha tratado de evitar la demanda de la Comisión de Comercio (el organismo del Gobierno que se encarga de estos conflictos) con el argumento de que la compañía tiene derecho a proteger su propiedad intelectual y, por tanto, a ocultar la fórmula con la que fabrica sus microprocesadores. Esa estrategia legal puede hacer que la demanda acabe ante el Tribunal Supremo para que sean sus jueces los que determinen si la tecnología está sometida a las leyes de propiedad intelectual.

En una primera demanda, la compañía Intergraph acusaba a Intel de haber tratado de obtener información técnica sobre un procesador de imágenes desarrollado por esa pequeña empresa; sin embargo, Intel, según esa demanda, se negaba a facilitar a cambio las especificaciones de sus microprocesadores Pentium II. Intel, según ello, quería la información técnica de Intergraph para hacer que los productos de esa compañía fueran compatibles con sus Pentium; para los abogados del Gobierno, ese comportamiento puede ser abuso de posición dominante. Un juez de primera instancia dio la razón a Intergraph, aunque la decisión está recurrida por Intel.

La demanda llega tras nueve meses de investigación y después de que todas las compañías implicadas hayan tenido la oportunidad de presentar sus argumentos a ese organismo.

Fuentes del sector aseguran que la demanda presentada contra Intel puede ser la primera y la menos grave. La segunda -también inminente- acusaría a la compañía de ejercer prácticas contra la libre competencia.

El Gobierno estudia si Intel ha usado su posición para obtener información que luego le permitiera fabricar productos más complejos; Intel podría haber usado esos datos técnicos para fabricar microprocesadores que incorporan funciones de vídeo, es decir, productos que cierran el mercado a los fabricantes de tarjetas de vídeo para ordenadores.

Intel anunció hace unos días que retrasaba al año 2000 la comercialización de los nuevos microprocesadores Merced, considerados la base de la futura generación informática. Intel va a comercializar en los próximos meses nuevos Pentium II de alta velocidad (500 megahercios) con la tecnología MMX2. Los expertos vaticinan un fuerte descenso de los precios en las próximas semanas, lo que dejará a Intel un margen de beneficios inferior al previsto.