4.000 ciudadanos suscriben alegaciones contra el cuarto cinturón

Las entidades cívicas de la campaña contra el cuarto cinturón presentaron ayer alegaciones al proyecto en el tramo Abrera-Terrassa y solicitaron al Ministerio de Fomento la nulidad de la actual tramitación y la retirada del proyecto. Más de 4.000 ciudadanos han firmado y presentado alegaciones de acuerdo con las peticiones de la campaña. Una cincuentena de entidades de varios municipios tramitaron las 14 peticiones al Ministerio de Medio Ambiente y al de Fomento para conseguir la nulidad de pleno derecho de la documentación sobre el cuarto cinturón expuesta a información pública hasta el día de ayer. El coordinador de la Asociación para la Defensa y el Estudio de la Naturaleza (Adenc), Manel Cunill, advirtió que "si el Ministerio de Fomento no acepta estas alegaciones, las entidades llevarán el proyecto a los tribunales, donde presentarán un contencioso administrativo". Según la plataforma de entidades, el cuarto cinturón es una autovía de carácter provincial, cuyas competencias son exclusivas de la Generalitat de acuerdo con la Constitución y el Estatut. "El hecho de que el Ministerio de Fomento tramite el proyecto entra en conflicto con las competencias que son propias del Gobierno catalán", indicó Cunill. Los miembros de la Campaña contra el cuarto cinturón afirmaron: "Nos sorprende el silencio de la Generalitat, porque una administración tan celosa de la autonomía y de las competencias está cerrando los ojos ante una vulneración del Estatuto y está renunciando a ejercer la soberanía que es necesaria", señaló el coordinador de Adenc. Las entidades adheridas a la campaña consideran que el proyecto prescinde totalmente del procedimiento legal establecido en Cataluña en materia de carreteras y de evaluación del impacto ambiental. Además, la plataforma denuncia que la tramitación del tramo Abrera-Terrassa es motivo suficiente para proceder a su nulidad, porque "la tramitación de una carretera se tiene que contemplar en su trazado global como indica el reglamento de carreteras", concluyó Cunill.