Una nueva bomba de los GRAPO en Madrid hiere a dos policías

La organización terrorista GRAPO volvió ayer a actuar en Madrid mediante la colocación de una bomba a las puertas de la empresa de trabajo temporal Attempera, en la calle de Alberto Alcocer, junto a la plaza de la República Dominicana. La explosión causó heridas leves a dos policías nacionales y produjo intoxicación a varias personas. Pero el artefacto podría haber acarreado una tragedia de no haber sido porque, debido a un fallo en su mecanimos, sólo estalló en parte.

Hace cuatro meses, los GRAPO (Grupo de Resistencia Antifascista Primero de Octubre)reiniciaron su actividad, después de un largo silencio, con otra bomba en Madrid: en la empresa de trabajo temporal People, en la avenida de América.Ayer, un hombre telefoneó a las 11.30 horas a Attempera y anunció en nombre de esa organización que diez minutos después haría explosión un artefacto. Attempera, en la que trabajan una docena de empleados, está en un concurrido edificio de oficinas. A la mayoría de la gente no le daba tiempo a evacuarlo, por lo que la policía recomendó que no salieran a la escalera.

Luego, en el mismo momento en que llegaban dos agentes, se produjo una fuerte detonación en la tercera planta. "Fue un estruendo, como si se hubiera caído de golpe el ascensor", relató una de las oficinistas. La onda expansiva dejó conmocionados a los dos policías e intoxicó a varias personas de los pisos superiores porque el humo y el polvo ascendieron por el hueco de la escalera.

Los artificieros comprobaron después que el artefacto, compuesto por entre uno y dos kilos de cloratita, metidos en una lata, había sido depositado en una papelera junto a un extintor de incendios. Un fallo en el mecanismo hizo que sólo estallase el detonador. "Ha sido milagroso porque a esta empresa vienen a diario cientos de personas que buscan empleo", comentó una vecina.

El de ayer fue el quinto atentado de los GRAPO desde que reemprendieron su actividad tras la ruptura de las negociaciones que mantenían con el Gobierno. Antes atacaron con explosivos delegaciones de Hacienda, repetidores de Radio Nacional y la aseguradora Previasa, anteriormente perteneciente a Publio Cordón, que está en paradero desconocido desde que fue secuestrado por ellos mismos. Pese a que Interior dice no estar preocupado, expertos antiterroristas temen que su ofensiva sea cada vez más dura.