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CiU admite en el Parlament que sobran agentes de la policía y de la Guardia Civil en Cataluña

CiU admitió ayer en el Parlament que en Cataluña sobran agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil. La coalición que gobierna en Cataluña no precisó cuántos. Sumó sus votos a los del resto de la Cámara -la excepción la puso el PP- para apoyar una proposición no de ley de Esquerra Republicana (ERC). La proposición de los republicanos independentistas, en un giro eufemístico que ofrece pocas dudas sobre su finalidad, insta al Gobierno de la Generalitat a propiciar la "redimensión" de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado (la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía) en las zonas en las que van siendo sustituidos por los Mossos d"Esquadra.

El denominado modelo policial catalán, nacido el 17 de octubre de 1994 de los acuerdos de CiU con el PSOE, se basa en la sustitución de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) y de la Guardia Civil por los Mossos d"Esquadra en tareas de seguridad ciudadana y orden público. El CNP y la Guardia Civil se reservan las tareas supracomunitarias como la vigilancia de fronteras o la persecución del crimen organizado y las labores antiterroristas. Este modelo de sustitución, según ERC, significa que no sólo se sustituye un cuerpo por otro, sino que cuando llegan unos agentes -los mossos-, los otros -los del CNP y de la Guardia Civil- se van. "La sustitución", señala el diputado republicano Joan Ridao, "significa que los mossos no vienen a sumarse a las policías ya existentes, sino a sustituirlas en dos funciones". Hace un tiempo, la opinión de que un policía se iba cuando llegaba otro era la del Departamento de Gobernación. Hasta que, hace unos meses, el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, vino a decir que que no hacía falta que todos los guardias y policías se fueran cuando llegaran los mossos. Esta opinión de Pujol se mantuvo hasta ayer, en que el grupo de CiU bendijo e hizo buenos los deseos de los independentistas. Eso sí, con tres enmiendas que para nada cambian el espíritu de la proposición no de ley de ERC y sólo la matizan y liman semánticamente. En una gran elipsis y abordando el asunto sin llamar a las cosas por su nombre, la proposición se refiere textualmente a "trasladar a la Junta de Seguridad de Cataluña, órgano paritario de participación del Estado y la Generalitat en temas de seguridad, la conveniencia de modular y redimensionar los recursos destinados a las funciones asignadas a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado a partir del despliegue de los Mossos d"Esquadra...". Ya sin circunloquios, pero siguiendo sin llamar a las cosas por su nombre, donde ERC fundamenta su proposición es en la exposición de motivos. Allí se señala que hay un "número de recursos desproporcionado respecto a los requerimientos o estándar mínimos de dotación de personal". Los grupos de Iniciativa per Catalunya (IC) y del PSC, que votaron la propuesta de ERC, se apresuraron a especificar que ello no quería decir que compartieran en su totalidad la exposición de motivos. Como el portavoz de CiU nada dijo sobre la argumentación de motivos, hay que entender que la coalición gobernante hace propio que sobran policías y guardias y que, además, éstos deben ir abandonado Cataluña a medida que los mossos los vayan sustituyendo. ERC, además, logró los votos del resto de la Cámara, con la excepción de los del PP, sobre el traslado al Gobierno central de la necesidad de reformar la Ley de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que data de 1986. Ridao dijo que esta ley "se ha revelado como un instrumento legal que obstaculiza el desarrollo de modelo policial catalán". En el Departamento de Gobernación se admite la necesidad de reformar la citada ley "para adecuarla a la nueva realidad en la que los Mossos son la policía ordinaria de Cataluña, y eso en el año que se redactó la ley no era así".

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