España autorizó ventas de armamento a Turquía por 45.164 millones entre enero de 1996 y marzo de 1998

La junta interministerial sobre comercio de armamento autorizó exportaciones a Turquía por un importe total de 45.164 millones de pesetas entre enero de 1996 y marzo de este año, según dijo ayer en el Congreso el secretario de Estado de Defensa, Pedro Morenés. Aunque negó que España esté negociando la venta a Turquía de material militar por valor de 300.000 millones de pesetas, como publicó EL PAÍS el pasado 3 de marzo, las operaciones que enumeró, en distinto grado de desarollo, superan dicha cifra.Según los datos aportados por Morenés, en 1996 se autorizaron ventas por 15.000 millones de pesetas, en 1997 por 20.000 y en los tres primeros meses de este año por 9.258. Además, calificó de "inminente" y "viable" la adjudicación de otros dos contratos, relacionados con "aviones de transporte 235" y "municiones y espoletas". Se refería previsiblemente, aunque no ofreció detalles, a la compra de nueve aviones -tres guardacostas y seis de patrulla marítima- de CASA por unos 15.000 millones de pesetas, sin contar los equipos electrónicos, y al suministro de una partida de bombas de aviación por alrededor de 900 millones.

Finalmente, añadió que el Ministerio de Defensa turco ha puesto en marcha sendos programas de adquisición de fragatas y cazaminas y existe la posibilidad de que los consiga la empresa Bazán, aunque sería "prematuro prejuzgar que puedan considerarse dentro de la cartera de pedidos española".

Precisamente, la información de EL PAÍS aludía de manera expresa al programa de aviones y al de fragatas, cuyo importe ronda los 287.000 millones de pesetas, advirtiendo que este último se encontraba todavía en fase inicial. El presidente José María Aznar se refirió irónicamente al mismo afirmando que "igual es tan secreto que no he sido informado".

Las ventas de armas a Turquía fueron duramente criticadas por el portavoz de IU, Willy Meyer, quien recordó la falta de respeto a los derechos de la minoría kurda y la ilegalización del partido islamista.

Morenés aseguró que el Gobierno cumple "a rajatabla" tanto la legalidad como sus compromisos internacionales, pero sin olvidar que Turquía es un miembro de pleno derecho de la OTAN. Tanto el secretario de Estado como los portavoces de la oposición coincidieron en la necesidad de impulsar el código de conducta sobre exportaciones de armas que actualmente discute la Unión Europea, aunque los segundos reclamaron una posición más activa al Gobierno español.