El cineasta italiano anuncia que abandona su exhibicionismo
Si alguien tenía alguna duda, ayer se despejaron del todo: Nanni Moretti es en persona tal cual se muestra en sus películas. Dubitativo, brillante, un poquito neurótico y muy sincero. Tras la proyección de su último filme, Abril, el actor y director se presentó ante la prensa para anunciar que ésta ha sido la última entrega de su fórmula comenzada con Caro diario. «La próxima vez no tardaré tanto como cuatro años en hacer otra película, pero lo que es seguro es que será distinta a estas dos. Abril sólo podía ser así, muy parecida a Caro diario, porque esa forma fragmentaria me parecía la más adecuada para contar cómo han sido estos años de mi vida y de la vida de mi país. No quería tener un guión preescrito, no quería actores profesionales ni música original».Alguien le preguntó si finalmente piensa hacer el musical sobre el pastelero troskista anunciado en Caro diario y en Abril. Moretti respondió que no cree que lo haga, «a pesar de que hay un pequeño pero combativo movimiento de opinión a favor», y añadió que esa referencia al musical no debe ser tomada al pie de la letra sino como una búsqueda de un estilo ligero, «no en el sentido de frívolo sino en el sentido contrario al de la pesadez».
El director también relativizó el carácter autobiográfico de sus últimas obras. «Es verdad que me he interpretado a mí mismo pero es difícil saber en qué grado la gente es ella misma cuando se pone delante de una cámara. De todos modos, algunas de las cosas que digo las comparto al cien por ciento y otras bastante menos. A pesar de todo, yo creo que el público deseará siempre poder ver películas personales, no estándares».
Las cosas claras
Otros aspectos muy admirados de Moretti, la naturalidad y la espontaneidad, la frescura y veracidad de los personajes, fueron explicados por el realizador como un resultado de un trabajo muy largo, de muchos ensayos. En cuanto a su sinceridad en las críticas a la izquierda, que según algunos no es más que una manera de hacerle el juego a la derecha, Moretti dijo: «Hace 25 años, cuando eran tiempos más militantes, ya le tomaba el pelo a la izquierda, la trataba con ironía, procurando ser siempre tan transparente en público como lo era en privado. Yo creo que el éxito de mis primeras películas tuvo mucho que ver con esa voluntad de decir las cosas claras. No hacerlo sería dejarse caer en brazos de una doble verdad que siempre acaba siendo paralizante».La última parte de la conferencia de prensa estuvo dedicada a Benigni, que el día anterior se mostró encantado de estar en Cannes junto a él («es como ir a Rusia con Bertinotti» -líder de la Refundación Comunista-): «Ayer fui a ver su película y obtuvo un éxito extraordinario. Viene por primera vez y se merece ya el reconocimiento de todo el mundo».
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.