El toro de Fermín Bohórquez se desplomó por "falta de riego"

, No estaba drogado, siquiera borracho. La sospecha que se tradujo en gritos desde los tendidos -«que saluden los charlines (en referencia al clan de narcotraficantes gallegos)»- cuando el primer toro de Pedrito de Portugal, lidiado el pasado domingo, cayó redondo antes de probar la espada, se ha desvelado apresurada.

El reconocimiento veterinario efectuado horas después de la corrida ha determinado que la caída se debió «a una falta de riego». Es decir, una «anoxia cerebral», en palabras del veterinario José Manuel Durán.

«Ni en el cerebro ni en el análisis de las vísceras se encontró nada anómalo», dijo Durán. «Simplemente», continuó, «se registró una parte congestionada». Es decir, el burel padeció un soponcio. «Igual que las personas pueden padecer un desvanecimiento, así le ocurrió al toro», concluyó el veterinario.