La Pompeya del año 2000
El desastre que ha asolado varios pueblos del sur de Italia se ha merecido ya un nombre terrorífico en la memoria histórica de este país: «Es la Pompeya del año 2000», coincidían ayer varios comentaristas en diarios y televisiones. Recordaban así la erupción volcánica que enterró con sus cenizas a varios miles de personas cerca de Nápoles en el año 79.Volcanes, terremotos o avalanchas, son muchas las causas naturales que azotan Italia, sacudida hace poco más de siete meses por un terremoto que quitó la vida a 10 personas y arrasó el patrimonio artístico de Asís. Los corrimientos de tierras han provocado 631 muertos en la región de Campania en los últimos 70 años. En toda Italia han causado 2.678.
Las últimas avalanchas de lodo en Campania, todas en 1997, provocaron 4 muertos el 10 de enero en Pozzano; otros 3, el 27 de noviembre, en Torre Annunziata; y otros 4, el 22 de diciembre, en Lettere (Castellamare). Las víctimas por desastres naturales en los últimos 50 años en Italia son 3.488.
La tragedia de estos días se va asemejando por sus crecientes cifras a la que sufrió Tesero (al norte de Italia) por una avalancha provocada por las lluvias interminables que rompieron un dique que retenía un lago artificial; 269 personas murieron ese 19 de julio de 1985.
Los últimos desastres
Éstos son los últimos desastres mortales provocados por avalanchas en diversos lugares del mundo:En agosto de 1996, 87 turistas perdieron la vida en una riada en el camping de Viescas (España).
En febrero de 1988, 500 personas murieron en el Estado brasileño de Río por un deslizamiento de tierras.
En junio de 1989, 300 personas murieron en Sri Lanka por unas inundaciones que desembocaron en avalanchas de tierra.
En marzo de 1991, 500 murieron en el sureste de Malaui por corrimientos de tierra.
En Tayikistán, en mayo de 1992, 200 personas murieron al pie del monte Pamir.
En mayo de 1993, 74 personas murieron y 250 desaparecieron en un deslizamiento de tierras que afectó a una cuarta parte de la zona de las minas de oro de Nambija, al sur de Ecuador.
El 6 de junio de 1994, 250 personas murieron y 500 desaparecieron en las provincias de Huila y Cauca (Colombia).
El 2 de noviembre de 1994, un tren volcó en un deslizamiento de tierras en Dronka (Egipto), provocando 529 muertos.
En China, 150 personas murieron en la provincia suroccidental de Sichuán, el 5 de junio de 1997.
En Tanzania, 100 personas quedaron enterradas vivas por un deslizamiento en una mina de oro en la región de Kagera (noroeste), el 17 de julio de 1997.
Unas cien personas murieron y 50 desaparecieron en la antigua república soviética de Tayikistán el pasado 29 de abril por un deslizamiento de tierras en Jotlon, al sureste de la capital, Dushanbé.
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