Latidos por teléfono

Electrocardiogramas desde casa... y a través del teléfono. Ésta es la base de la Electrocardiología Transtelefónica (ECGT), un nuevo sistema de diagnóstico cardiaco, presentado ayer de forma oficial por el Servicio de Urgencias del 061 del Insalud. De esta manera, ya no hace falta desplazarse hasta el hospital para someterse a un electrocardiograma. Treinta de los 35 equipos de que dispone, por el momento, el Insalud son para los médicos que hacen visitas domiciliarias. Los otros cinco se han instalado en los centros de salud más alejados de la capital: Rascafría, Buitrago de Lozoya, Villarejo de Salvanés, Robledo de Chavela y Cadalso de los Vidrios.El funcionamiento es sencillo. Si el paciente comienza a sentir ciertas molestias en su domicilio y decide llamar al teléfono de urgencias 061, inmediatamente llegará el médico responsable. Tras explorar al paciente, le realizará un electrocardiograma con la ayuda de un pequeño aparato portátil de bolsillo. Esta prueba puede realizarse en cualquier lugar en que esté el paciente, incluso en la vía pública. Después, se acopla el aparato al teléfono. Las señales acústicas llegan a una terminal de ordenador situada en el Centro de Coordinación de Urgencias del 061, en el número 43 de la calle de Lope de Rueda, donde un médico especialista hace el diagnóstico en poco menos de cinco minutos. Los datos se reflejan en la pantalla del ordenador de forma gráfica. Según sea la gravedad del resultado, se actúa en consecuencia. En caso necesario, se envía una UVI móvil o bien se comienza a aplicar el tratamiento más idóneo.

Este peculiar sistema de diagnóstico y prevención de enfermedades cardiovasculares funciona desde hace 15 días. Hasta el momento, ya se han realizado un total de 520 electrocardiogramas. Durante estos primeros días, a 73 pacientes se les detectó algún tipo de patología aguda y en 43 casos se optó por enviar una UVI móvil para trasladar al enfermo hasta el hospital. Los 30 restantes recibieron otro tipo de tratamiento clínico.

El objetivo es interpretar los datos de forma instantánea para poder actuar de forma inmediata desde un primer momento. Y es que la hora siguiente al infarto es fundamental para poder salvar la vida del enfermo. Según datos del Insalud, entre un 7% y un 15% de los pacientes fallecen antes de poder recibir la atención necesaria. Además, las enfermedades cardiovasculares suponen el 16% de las muertes que se registran en España. En la región madrileña, unas 4.000 personas fallecen por este tipo de dolencias.

"Los potencialmente beneficiarios no son sólo aquellos que sufran un infarto. También sirve para los que padezcan arritmias, anginas de pecho...", explicó el director regional del Insalud, Albino Navarro. Cada aparato portátil ha costado 75.000 pesetas. Las previsiones son que, a final de año, se hayan instalado hasta 140 equipos de bolsillo en diferentes puntos de la Comunidad. Después, el Insalud no ha descartado exportar el sistema a otras zonas del Estado.