La fiscalía investigará la reunión de "ultras" en Cercedilla

El delegado del Gobierno en Madrid, Pedro Núñez Morgades, anunció ayer que va a remitir a la fiscalía los informes sobre los altercados registrados este fin de semana durante la reunión de 17 ultraderechistas en el albergue regional Las Dehesas, en Cercedilla (5.000 habitantes). Con esta medida, Núñez Morgades pretende que sea el ministerio público el que determine si los integrantes del franquista y antidemocrático Movimiento Católico Español (en su rama juvenil) cometieron delito al insultar al alcalde de la localidad, José Luis López Mora, del grupo independiente ARCE, cuando éste les recriminó ir cantando y con banderas preconstitucionales por la plaza del pueblo. "Me llamaron gilipollas e imbécil", señaló ayer el regidor.La fiscalía también tendrá que pronunciarse sobre la supuesta exhibición de esposas (la Guardia Civil aún no ha comprobado que llevasen bates y porras) de los ultraderechistas (con edades comprendidas entre los 14 y 29 años), así como sobre los comentarios xenófobos y racistas que supuestamente emitieron en el albergue en referencia a unos niños negros que se alojaban allí.

El delegado del Gobierno, que afirmó que la investigación del caso aún no ha concluido, efectuó este anuncio tras una reu-nión mantenida con el director general de la Juventud de la Comunidad, Francisco Timermans; el alcalde de Cercedilla; el Defensor del Menor, Javier Urra; el presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, y mandos de la Guardia Civil y la policía local.

Al final de la reunión, los participantes mostraron su rechazo a las posturas antidemocráticas representadas por el Movimiento Católico Español, y señalaron que, en contra de las primeras informaciones, en ningún momento los ultras agredieron al alcalde ni a los niños negros.

Prohibición de entrada

Timermans adelantó que la Comunidad ha abierto un expediente para estudiar si puede prohibir la entrada de este grupo franquista a los albergues públicos de la región. También insistió en que el responsable del centro, Teodoro Benítez, fue destituido por no impedir el deterioro de la convivencia en el albergue y no informar a sus superiores. Fuentes sindicales y familiares del destituido consideraron hipócrita esta declaración y recordaron ayer que este cese ya le había sido comunicado a Benítez hace unos meses por otros motivos.El jefe nacional del Movimiento Católico Español, José Luis Corral, negó ayer que sus pupilos hubiesen insultado al alcalde de Cercedilla, al que llamó "paleto intolerante", calificó de "palabras galantes" las groserías dirigidas a una trabajadora del albergue -"iba muy ligerita de ropa y claro...", alegó- y negó que hubiesen exhibido armas. "Tan sólo unas esposas de juguete para unos ejercicios dirigidos a enseñarles a servir en el servicio de orden de nuestras manifestaciones", afirmó.