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Entrevista:

PATRICIA BARBERO EXPERTA EN ANOREXIA Y BULIMIA "No hacen falta unas medidas de 90-60-90 para ser perfecta"

Informar y ofrecer asesoramiento gratuito sobre la anorexia y la bulimia -dos enfermedades mentales que viven una auténtica proliferación de casos- son los objetivos con los que hace dos meses nació la asociación Aldakuntza (944761069). Una de sus voluntarias, la psicóloga Patricia Barbero, cree necesario abordar este problema que afecta a unas 8.000 personas en Euskadi sin caer en el catastrofismo porque "tiene solución". Una y otra vez, Barbero recuerda que la verdadera batalla en la prevención, en destruir los estereotipos del cuerpo perfecto. Pregunta. ¿Qué les diferencia de otros grupos que trabajan este campo? Respuesta. Que somos un grupo de profesionales: psicólogos, educadores sociales, trabajadores sociales, un médico y una dietista. Las asociaciones que conocemos suelen ser de afectados o familiares. Informamos sobre la anorexia [el pánico a engordar] y la bulimia [los atracones seguidos de vómitos provocados] y orientamos sobre el tratamiento adecuado en cada caso. P. ¿Cuáles son los síntomas? R. La dieta se restringe mucho, la persona juega en las comidas, desmenuza mucho la comida, la deja en una esquina del plato, una dieta, no comer en casa para que nadie sepa lo que comen,... P. ¿Dónde empieza la obsesión por estar delgado? R. Es normal que todos, incluida yo, queramos tener la figura deseada. El problema es cuando lo dejas de controlar y pasa a ser una obsesión. P. Las familias de los afectados echan de menos campañas institucionales de prevención. R. Resulta que se nos bombardea con productos light, adelgazantes y nunca se nos enseña la otra cara de la moneda, es decir, explicar que la anorexia y la bulimia están aumentando de manera alarmante y que hay que ponerle freno. Hay destruir los actuales estereotipos culturales, convencer a las mujeres de que el cuerpo tiene curvas porque se vende el ideal del cuerpo andrógino, en definitiva, que no hay que medir 90-60-90 para ser perfecta. Ahora que en algunos colegios se da educación de la salud en las que se presta especial atención a la drogadicción y al sida, también se deberían dar clases específicas sobre los desórdenes alimenticios. P. ¿Tienen edad estas enfermedades, una mínima y una máxima? R. En principio, se suele dar entre los 12 o 13 años, hasta los 22, pero no son límites cerrados. Aunque existen casos de niñas de 7 o 9 años que hacen dieta, preocupadas por su imagen. P. Pero también es un problema de chicos. R. Del total de afectados, cerca de un 10% son varones, aunque también va aumentando en su caso en la medida en que los estereotipos culturales también son para ellos. P. ¿Cuáles son los grupos de riesgo, si existen? R. Sí, modelos, gimnastas, deportistas, etcétera. Es importante que gente que ha superado la enfermedad, diga: "Estoy aquí, he pasado por una mala experiencia que tiene solución". P. Que suele ser larga y trabajosa. R. Depende mucho, cada caso es único. El tratamiento suele durar entre 6 u 8 meses y incluye tratamiento médico, cambio de los hábitos alimenticios, y a nivel psicológico la familia es esencial. P. ¿Qué nota le pondría a la atención que Osakidetza da en este ámbito? R. Son muchísimos casos los que tienen y hay muy pocos medios. Estoy segura que a nivel médico, de hospitalización, hacen todo lo que pueden, pero están desbordados. El problema es que faltan profesionales especializados.

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