Atutxa y Mayor ya no se hablan

Las relaciones entre el Ministerio del Interior y el departamento de Juan María Atutxa atraviesan su momento más frío desde la llegada del PP al poder, según el consejero vasco. El ministro Jaime Mayor y Atutxa no han intercambiado palabra en 15 días pese a que en este plazo se han cumplido, sin resultados, los plazos para los acuerdos pendientes, se ha descubierto el espionaje a una sede de HB y se ha detenido un grupo legal de ETA.Las negociaciones, en manos del secretario de Estado de Seguridad, Ricardo Martí Fluxá, y del viceconsejero vasco, José Manuel Martiarena, no han dado fruto.

Atutxa reconoció ayer no tener ninguna información, "ni oficial ni oficiosa", sobre el presunto incremento de la plantilla de la Ertzaintza en 250 agentes previsto por el Gobierno central, salvo por la prensa. "Esto no es un mercadillo. Hace más de un año que pedimos 500, con abundantes razones, y [no hemos tenido] ninguna res. puesta", adujo.

Arzalluz fue especialmente crítico con Mayor, a quien aconsejó que no siga por la senda de la arrogancia respecto al terrorismo. El ministro ha asegurado últimamente que se va a terminar con ETA sin necesidad de negociación alguna. "No me gusta la arrogancia n estos temas porque s peligrosa y hemos visto precedentes de mucha arrogancia que terminaron como el rosario de la aurora, pero allá ellos", dijo el líder el PNV.

Tiene la impresión, dijo, de que el ministro está "provocando" al PNV con el Fin de llevarlo a una discusión de tinte electoral sobre el terrorismo. "Mayor podrá seguir hablando, decir todo lo que quiera, pero que tenga cuidado porque por la boca muere el pez", concluyó. El ministro, que ayer estaba en Zamora, respondió con el silencio. Señaló que en esta ciudad era el día del juramento del silencio de Semana Santa y que quería "ser fiel" a ese espíritu para no replicar a Arzalluz.