Abbado dirige 'Boris Godunov' en Salzburgo con la Filarmónica de Berlín

"¿Por qué habría de cambiar de opinión, si para después del 2002 tengo un proyecto fantástico?", dice el director de orquesta Claudio Abbado, refiriéndose a su decisión de no prolongar su contrato de director permanente de la Orquesta Filarmónica de Berlín, que vence ese año. Porque prefiere "no hablar de cosas que están en el aire" no facilita mayores informaciones sobre la sorpresa que tiene entre manos, pero atiza la curiosidad anunciando que se ha propuesto realizar un sueño de su vida. "Será disfrutado por el público, como todos los sueños que consigo llevar a la práctica" comenta. El director actuó en Salzburgo con la Filarmónica de Berlín en Boris Godunov.

El 2003 es el año cero de Abbado. Hasta dicha fecha, todos sus planes son conocidos por la opinión pública. El resto es enigma. El maestro italiano acaba de firmar un contrato exclusivo de cinco años con la discográfica Deutsche Grammophon, que prevé cuatro grabaciones anuales, y hasta el 2002 está trazado un plan de cooperación entre el Festival de verano de Salzburgo y el Festival de Pascua de esta ciudad austríaca, en el que Abbado desempeña el cargo de director artístico.El Festival de Pascua de Salzburgo se inauguró el sábado con la reposición de la ópera de Mussorgski Boris Godunov, con una puesta en escena de Herbert Wernicke. Las críticas de la prensa austríaca celebraron la precisión del director de orquesta, Claudio Abbado, aclamaron en su papel de Borís a Anatoli Kotscherga -quien parece haberse recuperado bastante bien después de haber sido herido en un atraco en México-, elogiaron también al coro mixto compuesto por la Ópera de Viena y el filarmónico de Bratislava y destacaron las voces de Marjana Lipovsek, Sergei Leiferkus, Philip Langridge y Aage Haugland. Según varios críticos, esta puesta en escena, que el año pasado se presentó en Salzburgo bajo la dirección de Valery Gergiev con la Filarmónica de Viena, esta vez ha perdido algo de su impacto, aunque ha alcanzado su madurez con la Filarmónica de Berlín.

Abbado comentó el progreso de la orquesta que dirige desde 1989: "La Filarmónica de Berlín ha mejorado muchísimo. Desde la dirección de Furtwängler hasta Karajan, la orquesta desarrolló una tonalidad cálida y plena en la tradición de la música romántica del siglo XIX alemán. Afortunadamente, en los últimos años, los jóvenes músicos han encontrado una forma diferenciada de interpretar la música contemporánea y también dan una sonoridad diversa a la música barroca".

Con la Filarmónica de Berlín, Abbado grabará tres conciertos por año y tendrá que grabar uno anual con otras orquestas, según prevé el contrato recién firmado con la discográfica Deutsches Grammophon.

Con la Chamber Orchestra of Europe grabará arias de Haydn cantadas por Cecilia Bartoli, conciertos de piano de Beethoven con María Joâo Pires y lieder de Schubert en versión orquestal de Brahms, Reger y de Webern. También completará el ciclo de sinfonías de Bruckner con la Filarmónica de Viena. Las novedades previstas para los CD con la Filarmónica de Berlín incluyen desde la ópera Falstaff de Verdi hasta compositores contemporáneos como Wolfgang Rihn.