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Rajoy reitera en el Congreso sus descalificaciones a Chaves

Luis R. Aizpeolea

El ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, no rectificó ayer su calificativo de "gamberrismo institucional" dirigido a la Junta de Andalucía. El ministro, que tuvo un papel estelar en la sesión de control del Gobierno, acusó a la Junta de "deslealtad institucional" y a su presidente Manuel Chaves de "incumplir sus compromisos". Alfonso Perales, del PSOE, le acusó de "discriminar" a la Junta respecto a los nacionalistas.La sesión de control del Gobierno tuvo como protagonista al ministro Rajoy, tras la descalificación que dirigió el viernes después del Consejo de Ministros, a la Junta de Andalucía, gobernada por el PSOE. Tres diputados socialistas -Jesús Caldera, Amparo Rubiales y Alfonso Perales- interpelaron al ministro por su ataque a la Junta y su descalificación del documento de política autonómica que el PSOE le presentó el miércoles.

La diputada andaluza Amparo Rubiales advirtió a Rajoy que "el principio del fin de la UCD fue precisamente Andalucía y miren cómo terminó". "Sigan ustedes así que le aseguro que a nosotros nos beneficia mucho. Si se lo reprochamos es por lo grave que es esta actitud en el ministro del Gobierno responsable de las autonomías". Rubiales concluyó que "el Gobierno no quiere diálogo alguno, ni con la oposición ni con determinadas autonomías. El Gobierno no quiere pactar políticas de Estado porque tiene miedo al consenso".

Alfonso Perales, también diputado socialista andaluz, acusó a Rajoy de "comportamiento discriminatorio" en su trato a la Junta andaluza respecto a sus socios nacionalistas del PNV y CiU.

Acusó a Rajoy de que nunca se le ha ocurrido utilizar el calificativo de "gamberrismo institucional" para criticar comportamientos mucho más graves, como, el del PNV cuando decidió llevar al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo el asunto de los presos de ETA o el de CiU cuando exige la soberanía compartida.

Rajoy no rectificó su descalificación a la Junta de Andalucía, pero aseveró que fue una respuesta "defensiva" y matizó sus críticas. Dejó a salvo al secretario de Política Autonómica del PSOE, Ramón Jáuregui, del que dijo que es "sensato y equilibrado". Recordó que en su encuentro con Jáuregui, hace una semana, ya le pidió que la Junta de Andalucía cambiase de actitud.

El ministro mantuvo que el presidente de la Junta, Manuel Chaves, no cumple sus compromisos y "raya la deslealtad institucional". Aludió al acuerdo con la Junta el pasado noviembre sobre financiación sanitaria, denunciado posteriormente por Chaves, "una vez que consiguieron los fondos", dijo. También se refirió a la nueva reclamación de deuda histórica.

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Rajoy no se quedó ahí. Sacó a relucir las descalificaciones del consejero de la Presidencia de la Junta, Gaspar Zarrías, contra la ministra de Agricultura, Loyola de Palacio, a la que llamó "imbécil e irresponsable" y al ministro de Trabajo, Javier Arenas. "Le llamó frívolo, fullero, mentiroso y apoyo de mafiosos". También recordó que Chaves había acusado a Arenas de "filtrar secretos oficiales". No obstante, el ministro insistió en que "lo peor es incumplir los acuerdos" y tener una actitud que raya "la deslealtad institucional".

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