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Cerrado el tercer vertedero de la región por acumular líquido contaminante

Vicente G. Olaya

La Consejería de Medio Ambiente ha descubierto una enorme bolsa de líquido contaminante (lixiviados) bajo el vertedero de Colmenar Viejo, el tercero más grande de la región, tras el de Valdemingómez y el de Pinto. Para evitar que el líquido contamine los acuíferos cercanos, Medio Ambiente ha decidido cerrarlo urgentemente. Un informe de la Universidad Autónoma señala que bajo este vertedero, construido en 1995 y a donde van a parar los residuos sólidos urbanos de 63 pueblos del norte de la región, se acumulan más de 50.000 metros cúbicos (50 millones de litros) de lixiviados (sustancias contaminantes que produce la basura en fermentación). La cantidad de líquido descubierto es equivalente a la que cabría en 26 piscinas olímpicas (50 metros de largo, 21 de ancho y 1,8 de profundidad). De momento, la situación no supone riesgo para la salud de las personas.

Cincuenta técnicos de las universidades Politécnica y Autónoma, de la Comunidad de Madrid y de tres consultoras privadas trabajan desde octubre para eliminar la sustancia contaminante. Han diseñado ya un muro de contención de 11 metros de profundidad para impedir el avance del líquido, una zanja de drenaje que evite la expansión lateral de los residuos y 15 pozos de extracción de lixiviados. Cinco ya están en funcionamiento (sacan 32.000 litros al día, lo que supone un plazo de 5 a 10 meses para extraer todo el líquido).

Los trabajos de urgencia, que incluyen el sellado de la mayor parte de este estercolero (diseñado para albergar basuras hasta el 2001) cuestan 400 millones de pesetas. La Comunidad aprobó hace dos semanas la construcción de un nuevo vertedero, con un gasto de 1.000 millones, sin declaración de impacto ambiental. Realizar este estudio hubiera retrasado los trabajos nueve meses, según Medio Ambiente, y la urgencia de la situación no lo aconsejaba.

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Lixiviados en el dique

El vertedero sellado no fue impermeabilizado y sus sistemas de drenaje no funcionan

En octubre de 1997, la empresa BFI, que explota actualmente las instalaciones, dio la voz de alarma. Por el dique de contención del vertedero aparecían lixiviados. Medio Ambiente envió a sus técnicos a comprobar la denuncia. Los especialistas confirmaron la denuncia de la explotadora. La consejería de Medio Ambiente encargó entonces a las universidades Politécnica y Autónoma sendos informes sobre la situación.El informe de las universidades estima que el estercolero de Colmenar no está impermeabilizado y sus sistemas de drenaje no funcionan. Por eso, los lixiviados se acumulan bajo la basura y presionan sobre el frente, con el consiguiente riesgo de derrumbamiento.

Se revisaron además los expedientes de la construcción. El consejero, Carlos Mayor Oreja, declaró ayer: "Fue cuando descubrimos que el vertedero había comenzado a construirse sin declaración de impacto ambiental. La declaración fue hecha posteriormente, y con órdenes expresas de que la firmasen los siguientes: el PP. Cuando nosotros llegamos, ajenos a todo esto, la firmamos sin imaginarnos nada".

El socialista Arturo Gonzalo Aizpiri, ex director general de la Agencia de Medio Ambiente y de quien dependía el cumplimiento de las normas ambientales, dio ayer la siguiente explicación de los hechos relatados por Mayor Oreja: "El vertedero de Colmenar es sólo una ampliación del antiguo, por lo que no era necesaria ladeclaración de impacto ambiental. No obstante, y para introducir posibles medidas correctoras, la elaboramos. La declaración estaba acabada al tiempo que el vertedero entró en funcionamiento [mayo de 1995]. Si nosotros no la firmamos, fue porque dejamos esa responsabilidad a nuestros sucesores. Si hubiéramos querido ocultar algo, lo habríamos firmado nosotros mismos". Arturo Gonzalo Aizpiri añadió: "El vertedero no está impermeabilizado porque ninguna ley obligaba a ello en aquel momento. La mayoría de los vertederos de Madrid tampoco lo están. Un ejemplo: Valdemingómez. Si los drenajes de Colmenar no funcionan, es un problema de construcción o de mantenimiento".

El portavoz de Medio Ambiente del PSOE, Armando García, afirma: "Si hubo algo que no fue correcto, el PSOE ya lo pagó en las elecciones. El pasado no justifica que ahora no se haga una declaración de impacto. Colmenar no se merece otro vertedero más".

El Ayuntamiento de Colmenar, por su parte, aprobó ayer en pleno, con los votos a favor del PSOE e IU y la oposición del PP, enviar un escrito a la Comunidad para comunicar su rechazo al nuevo vertedero, informa Raquel Santos. Tanto PSOE como IU consideran que con esta operación se abusa de la solidaridad que tiene Colmenar con los 65 pueblos que ahora vierten su basura en el municipio.

PSOE e IU consideran además que ésta es una buena oportunidad para que la Comunidad de Madrid obligue a municipios como Alcobendas y San Sebastián de los Reyes, que triplican en población a Colmenar, a que busquen otros basureros en sus respectivos términos y no sigan vertiendo sus basuras en Colmenar.

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Sobre la firma

Vicente G. Olaya
Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.

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