Rato y Pujol se reunen para acordar la reforma del impuesto sobre la renta

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, viajó ayer a Madrid para reunirse, por espacio de dos horas, con el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato. En ese encuentro se habló de la reforma del impuesto sobre la renta, para la que "existe una base fuerte para el acuerdo", entre el Gobierno y sus socios nacionalistas catalanes, según fuentes de Economía.El presidente de la Generalitat declaró a su regreso a Barcelona que este acuerdo "tiene que resolverse" la próxima semana y para ello está prevista una reunión entre responsables del Ministerio de economía, el portavoz de CiU en el Congreso, Joaquim Molins, y el consejero de Economía de la Generalitat, Artur Mas.

Además de la reforma fiscal, Pujol y Rato abordaron el proceso de construcción europea y la reducción del déficit público. Respecto del IRPF, los aspectos centrales tratados fueron la fiscalidad de la vivienda y de las rentas del trabajo. En relación a la tarifa, ya existe un acuerdo previo para situar el tipo máximo en torno al 48%.

CiU ha insistido, sin embargo,en que no se elimine la deducción de los intereses de créditos hipotecarios y que se mantenga la de los seguros. Hacienda quiere que los intereses se deduzcan en la cuota del impuesto -en un 20% para las primeras 500.000 pesetas, incluida amortización-, y eliminar el beneficio fiscal de los seguros.

Según una nota del Ministerio Economía hecha pública ayer, vicepresidente segundo y el presidente de la Generalitat catalana trataron en su encuentro sobre el tramo de la tarifa del impuesto sobre la renta que corresponde a las comunidades autónomas.

Rato y Pujol hablaron sobre el proceso de construcción europea, especial, del informe que el Instituto Monetario Europeo y la Comisión Europea darán a conocer el próximo miércoles sobre los países que cumplen las condiciones para formar parte del euro.

Además, Rodrigo Rato planteó a Jordi Pujol la necesidad de reducir más el déficit público cuando el crecimiento económico así lo permita. Ayer, el presidente del Gobierno, José María Aznar, anunció en Santiago de Chile que diferencia entre ingresos y gastos de las Administraciones públicas terminará 1998 en el 2,2% del PIB, dos décimas por debajo de la revisión inicial.

Por otra parte, Hacienda anunció ayer que en enero de 1999 se rebajarán las retenciones del trabajo en el impuesto sobre la renta para adecuarlas a la tarifa que se aprobará próximamente y que se aplicará en la declaración a presentar en junio del año 2000.