Sanz, contra el árbitro; Gaspart, eufórico
Lorenzo Sanz, presidente del Real Madrid, cargó ayer contra Gracia Redondo. "En la segunda parte, el mejor ha sido el árbitro. Ha sido lamentable la expulsión de Hierro y ahí ha estado la clave. Si enseña esa tarjeta debería habérsela mostrado a la mitad de los jugadores que estuvieron sobre el campo". El presidente madridista, que por vez primera en los últimos doce años no acudió al Camp Nou -en el que tampoco estuvo ningún otro directivo del Madrid-, agregó: "Siempre tenemos mala suerte con este árbitro. No mide a todos los equipos por el mismo rasero. No todo está decidido. Ellos después del partido del Bernabéu nos llevaban siete puntos y los atrapamos".
Joan Gaspart, vicepresidente del Barcelona, aseguró que su equipo dominó el partido: "No les hemos dejado practicar su juego. No hay que cantar victoria antes de hora. Más que por el resultado estoy contento por la forma en que hemos jugado".
El autobús que trasladó al Madrid hasta el Camp Nou sufrió la rotura de cinco lunas causada por las piedras lanzadas por seguidores del Barça.
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