Cien familias portuguesas del poblado de Pitis esperan su traslado
Un islote de chabolas ocupa parte de la futura urbanización de Las Tablas. Son las 135 casetas del poblado de Pitis, visibles desde los trenes que van a la sierra y habitadas sobre todo por inmigrantes portugueses.
Los ediles de Urbanismo, Ignacio del Río, y de Fuencarral, Beatriz Elorriaga, aseguran que se está estudiando una solución para estas familias que llevan más de siete años en la zona. "Pero aún no hay ninguna decisión tomada", explican.
En el verano de 1995, los propietarios de los terrenos se comprometieron a aportar 220 millones de pesetas para realojar a estas familias chabolistas en prefabricados. El Ayuntamiento propuso para ello un terreno en el cercano barrio de Las Alamedillas, cuyos habitantes ya impidieron en 1990 el realojamiento en su vecindario de los chabolistas gitanos de la Cruz del Cura.
La oferta no llegó a materializarse, y desde entonces han aumentado las voces contrarias al realojamiento de chabolistas en campamentos de prefabricados por las elevadas posibilidades de que acaben convertidos en guetos de marginación.
El poblado de Pitis nació en 1987, pero sus habitantes, procedentes la mayoría de la humilde comarca lusa de Tras os Montes, fueron desalojados. Poco después regresaron. Hasta hoy.
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