Otros siniestros aéreos en la región

El accidente aéreo de ayer en Pinilla del Valle, que costó la vida a cinco militares, ha sido el primero registrado este año en la Comunidad de Madrid. En los últimos años, varios siniestros de características similares han golpeado a la región:30 de mayo de 1997. Una avioneta se estrella en el kilómetro 10,5 de la carretera de Extremadura. Carlos José de Alfonso, de 26 años, y su alumno Joaquín Agra, de 20, fallecieron en el acto. El aparato se dirigía al aeródromo de Cuatro Vientos cuando cayó en barrena y chocó contra la mediana de la autovía, en dirección a Madrid. Sorprendentemente, el siniestro no alcanzó a ninguno de los miles de vehículos que transitaban en ese momento por el lugar.

2 de marzo de 1997. Un ultraligero se precipita contra un huerto en la localidad de Torrejón de la Calzada. Sus ocupantes resultaron heridos de gravedad. El avión, que ensayaba para una demostración en un festival de vuelo, se clavó en el suelo a poco más de tres kilómetros del casco urbano del pueblo.

24 de enero de 1997. Dos avionetas militares de la base aérea de Getafe chocaron a unos 100 metros de altura cuando se disponían a aterrizar. Murieron un teniente y un capitán de una avioneta.

16 de diciembre de 1996. Un helicóptero civil se estrella en Fuenlabrada. Los tres tripulantes quedaron calcinados tras el estallido de la nave, que volaba entre la niebla. Una mala evolución del piloto combinada con unas condiciones meteorológicas adversas pudieron causar el desastre. El helicóptero superó una inspección antes de despegar.

9 de agosto de 1995. Un aeroplano de dos hélices que acababa de despegar de Barajas desciende bruscamente e impacta a 1.500 metros del aeropuerto. Sus dos ocupantes resultaron heridos de gravedad, con quemaduras hasta en el 85% del cuerpo. Uno de los pilotos falleció meses después a consecuencia de las heridas.

23 de febrero de 1995. Durante un aterrizaje de emergencia, una avioneta cae en el arroyo natural de Butarque, en Leganés. Dos personas sufrieron cortes en la, cabeza mientras un tercer ocupante resultó ileso. El piloto explicó que al aparato le falló el motor durante el vuelo.

29 de marzo de 1993. Un motovelero, perteneciente al aeródromo de Cuatro Vientos, se estrella contra el paraje de la finca Peñaca, en las cercanías de Móstoles. La experiencia de los dos pilotos no impidió que ambos perdieran la vida. 31 de mayo de 1992. Un avión ultraligero impacta contra el camino de Los Nidos, en el término municipal de Griñón, a 28 kilómetros al sur de Madrid. Los dos tripulantes fallecieron. El aparato llevaba a cabo un vuelo nocturno, a pesar de que la normativa internacional de aviación civil lo prohibe.