La oposición teme una guerra abierta del Gobierno con los zapatistas

El Partido de la Revolución Democrática (PRD) teme que el Gobiemo mexicano eleve la tensión militar en el Estado de Chiapas para forzar una guerra abierta con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). La gravedad de esta situación frenaría las reformas democráticas iniciadas en México y permitiría al gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) continuar en el poder, paralizando la evolución hacia el pluripartidismo efectivo.La preocupación ante la posible paralización de estas reformasha llevado a una comisión delPRI) -integrada entre otros por Raimundo Cárdenas, secretariode asuntos internacionales; Pablo Gómez, coordinador del PRD en la Cámara de Diputados, y Carlos Payán, senador e integrante de laComisión de Concordia y Pacificación- a recorrer varios países europeos para explicar en diversos organismos, entre ellos el Parlamento Europeo, la situación en elpaís tras la matanza de 45 personas el pasado 22 de diciembre en Acteal y las consecuencias queésta puede traer.

"Es necesario que se castigue a los autores materiales e intelectuales de los asesinatos", asegura Carlos Payán, quien añade que el entonces gobernador de Chiapas, Julio César Ruiz Ferro, conocía con antelación los planes para asesinar a los indios tzotziles.

Los parlamentarios del PRD alerta sobre la entrada del Ejército mexicano en las aldeas de Chiapas bajo el pretexto de proteger a la población civil. "Lo que pretende el Ejército es provocar un enfrentamiento con los zapatistas que desemboque en una guerra generalizada. Pedimos al Ejército que abandone las aldeas".

La disposición del Gobierno del presidente Ernesto Zedillo para solucionar el conflicto es puesta en entredicho, especialmente en lo referente a los acuerdos de San Andrés, firmados el 16 de febrero de 1996 entre el EZLN y el Gobierno y uno de cuyos puntos principales hace referencia a la concesión de cierto grado de autonomía para los indígenas de Chiapas.

Campaña del PRI

Al tiempo que el PRD, el PRI ha lanzado una ofensiva de imagen internacional para tratar de paliar las críticas recibidas tras la matanza de Acteal, perpetrada por paramilitares relacionados con el partido. Una comisión de parlamentarios y senadores priístas recorre estos días Europa para explicar su versión de lo ocurrido y cómo puede afectar a la reforma del Estado emprendida por Zedillo.Los diputados priístas señalan que se están confundiendo algunos términos en la implicación del PRI en la matanza ya que, según ellos, aunque el alcalde de Cenalhó, Jacinto Airas, perteneciente al PRI fuera detenido por su implicación en los hechos, eso no significa que el resto del partido tenga que ver con el asunto. Para esta delegación, lo sucedido responde a un conflicto indígena sobre la propiedad de un banco de grava, suceso en el que se mezclan diferencias de carácter religioso.