Condenada una mujer que no denunció los abusos que sufría su hija
El Tribunal Supremo ha confirmado la condena a una madre como cómplice de los abusos sexuales que cometió su marido con la hija de ambos, entonces de 14 años, por no haber evitado o al menos dificultado los actos contra la libertad sexual de la muchacha que realizó el padre, pese a que la chica se los relató. El alto tribunal establece que la madre, que contestó a su hija que eso le pasaba por acercarse a su padre, fue cómplice de los abusos "por omisión".
Los hechos probados de la sentencia ahora confirmada, dictada por la Audiencia Provincial de Oviedo, sucedieron en Ujo, en el concejo asturiano de Mieres, en la casa en la que vivían Félix M. G. y Toribia P. V. En noviembre de 1993, en el salón del domicilio, una de las hijas fue objeto de tocamientos "libidinosos" por parte de su padre. La chica se lo relató posteriormente a su madre, tanto esta vez como tras los tocamientos que hubo en fechas siguientes, pero la madre no hizo nada al respecto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.