El PP defiende una caja por comunidad y una profunda reforma de la CECA

El debate sobre la reforma de las cajas está en marcha. El Gobierno y el PP han elaborado una primera propuesta que ha remitido al resto de grupos políticos y a los sindicatos. En ese documento, se propugna que se avance en las fusiones intrarregionales con el objetivo de llegar a una entidad por comunidad autónoma, aunque tampoco descarta las fusiones de cajas de varias comunidades, y se defiende una transformación de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA). Además, el texto abre el camino a la futura transformación de las cajas en sociedades anónimas, si bien matiza que aún no es el momento.

El PP y el PSOE parecen dispuestos a enterrar el hacha de guerra en, el sector de las cajas de ahorros y a introducir unas reglas del juego consensuadas. Los primeros contactos entre representantes de ambos partidos se produjeron en la recta final del año pasado y a ellos se han ido sumando otras formaciones políticas (CiU y PNV), así como las centrales sindicales.De esa fase inicial de contactos más o menos esporádicos se ha pasado al debate con papeles. El primero ha sido el elaborado conjuntamente por el PP y el equipo del vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato. El documento, que consta de 13 páginas, es aún bastante descriptivo y aborda siete aspectos de la negociación:

Naturaleza jurídica. El PP recalca que "las cajas de ahorros no son sociedades anónimas y no existen títulos de propiedad transmisibles. Hay una indefinición sobre la propiedad de las cajas y, por lo tanto, todo tipos de problemas para su venta y valoración por el mercado". Por ello, sugiere su "transformación en otro tipo diferente de entidades jurídicas, como por ejemplo, en sociedades anónimas". Sin embargo, el PP entiende que ese cambio no se debe abordar en este momento. Esta transformación es una vieja petición de la banca, pero cuenta con la oposición del Banco de España y de varias fuerzas políticas. Para el PSOE, por ejemplo, esta conversión es casus belli.

Fusiones. El partido que preside José María Aznar defiende que las cajas tengan un mayor tamaño. Por ello, propugna las fusiones de entidades de la misma región y, con menor entusiasmo, las interregionales. "En cada comunidad", dice el documento, "debería haber una caja regional, o dos como mucho, superando personalismos e intereses localistas (...) Las fusiones interregionales podrían estar justificadas entre cajas de tamaño medio, pero no deberían ser prioritarias si existieran servicios centrales comunes y eficientes acuerdos de colaboración. Las dificultades jurídico-políticas de estas fusiones son muy grandes".

La CECA. El documento plantea una profunda transformación de la actual CECA. "La CECA es prescindible como caja propiamente dicha. Su función representativa podría organizarse también de manera distinta", señala textualmente. La idea del PP es constituir una Confederación que "establezca servicios comunes que permitan compartir costes fijos y generar economías de escala" y desgajar su parte representativa, siguiendo el modelo de la patronal bancaria, AEB. Este debate se pone sobre la mesa justo cuando se está en pleno proceso de renovación de los órganos de gestión de la CECA, incluida la presidencia, cargo para el que se perfila como favorito Manuel Pizarro

Estructura de órganos. El PP pretende que todas las cajas tengan una estructura similar. Las últimas leyes aparecidas (la de la Comunidad Valenciana, sobre todo, Castilla La Mancha y Andalucía) han introducido importantres modificaciones tendentes a aumentar la representación de los partidos políticos.

Profesionalización. El documento señala la necesidad de dotar a las cajas de "gestores de reconocida capacidad técnico-financiera, con nombramientos bien regulados y dotados de estabilidad". No obstante, poco después recalca que las cajas "no han dado problemas a la autoridad supervisora, no ha existido una crisis de cajas como ha existido una crisis bancaria y han facilitado el funcionamiento del sistema bancario proveyendo liquidez en el sistema interbancario".

Inversiones. El PP aboga porque las cajas inviertan en empresas industriales o en grandes obras de infraestructuras, pero sin intervenir en su gestión. Deben ser sólo socios financieros.

Competencias estatales. Los responsables del PP quieren definir las competencias de las comunidades autónomas y hacen especial hincapié en que la supervisión debe recaer, sin dudas, en el Banco de España.