Rato no garantiza que el tipo máximo del IRPF baje al 40% esta legislatura

La rebaja del tipo máximo del impuesto sobre la renta desde el 56% actual hasta el 40% durante esta legislatura no está asegurada. El vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, eludió ayer en dos ocasiones reafirmar esta promesa electoral. "El único compromiso del Gobierno ahora es presentar una nueva tarifa del impuesto sobre la renta" afirmó Rato tras el Consejo de Ministros de ayer. En esta reunión, el Gobierno aprobó la reforma de la fiscalidad de las pequeñas y medianas empresas que, según Rato, supondrá una rebaja media del 10% y tendrá un coste recaudatorio de hasta 64.000 millones de pesetas.

El vicepresidente tampoco se comprometió ayer a fijar un calendario concreto para la reforma del IRPF. Sólo reiteró que el Gobierno la aprobará en el primer semestre de este año. Insistió también en que habrá una rebaja general del impuesto, aunque respondió con evasivas a dos preguntas sobre si el tipo marginal máximo, ahora en el 56%, se reducirá hasta el 40%, tal como figura en el programa electoral del PP."Todos los partidos han propuesto en sus programas la rebaja del tipo marginal", dijo el vicepresidente en alusión especial al PSOE, que ha criticado esta medida por beneficiar a los más ricos. Rato respondió que si baja el tipo máximo, también lo harán los restantes tramos. Pero no fue más allá porque "uno no está obligado", dijo, "a contestar a tonterías".

El vicepresidente explicó que, tras la reforma, el IRPF no gravará un mínimo vital de renta, será un impuesto más simple que el actual, favorecerá el ahorro y liberará a un número indeterminado de contribuyentes de la obligación de declarar.

Insistió también en que no afectará a la financiación autonómica. "Un ciudadano que gane un millón de pesetas en Murcia o en Badajoz", dijo, "tendrá la misma fiscalidad", aunque aclaró después que esto es en lo que respecta a la tarifa estatal. No habrá tampoco efecto financiero en los Presupuestos de las comunidades.

Mientras llega la reforma, el Gobierno aprobó ayer un nuevo sistema de tributación para las pequeñas y medianas empresas que supone una rebaja media "del l0%", según el vicepresidente. Con la reforma, "el Gobierno cumple totalmente su programa electoral respecto al sector", afirmó Rato. El coste recaudatorio está estimado "entre 34.000 y 64.000 millones de pesetas", según explicó, "aunque se recuperará gracias a una mayor actividad económica y a una mayor eficacia en la lucha contra el fraude fiscal".

Los empresarios y profesionales que facturen hasta 100 millones de pesetas, un colectivo de más de tres millones, podrán elegir entre tributar por el IRPF según un nuevo sistema de estimación objetiva simplificada o por el de módulos, que también se modifica. El objetivo, según Rato, "es favorecer la inversión y la creación de empleo", así como "la lucha contra el fraude fiscal".

El Gobierno aprobó también una subida del 2,1 % en las pensiones de los funcionarios jubilados.