La oficina para inmigrantes de Boadilla no abrió en el plazo fijado
La oficina de integración para inmigrantes de Boadilla del Monte (19.000 habitantes) no se abrió el pasado lunes como estaba previsto. El equipo de gobierno del PP hizo público, a través del boletín informativo municipal del pasado día 15, que la oficina se abriría el día 1 con el objetivo de recoger las necesidades de los 234 inmigrantes marroquíes que viven en el poblado chabolista de Los Yelmos, pero no ha sido así. La oficina todavía estaba ayer cerrada. El PP achaca el retraso a que aún no ha llegado el mobiliario para acondicionar el local. La oposición política acusa al PP de hacerse autobombo y de incumplir reiteradamente sus promesas para con los chabolistas.La nueva oficina de integración de inmigrantes tiene un proyecto prioritario: la creación de una bolsa de trabajo para regular la actual contratación ilegal de marroquíes como peones de obra en la construcción. Los chabolistas se apostan todas las mañanas en la plaza del pueblo a la espera de trabajo. Los constructores llegan en sus coches, seleccionan a un puñado de marroquíes y se los llevan a trabajar a la obra. Al final de la jornada, los inmigrantes cobran una media de 2.000 pesetas a cambio de todo un día de trabajo en el que tienen que hacer las tareas más duras, según dicen. Hay que resaltar que trabajan desamparados, sin seguro alguno que les pueda cubrir los gastos en caso de accidente laboral.
Por otro lado, el pleno municipal aprobó ayer un convenio con la Comunidad por el que se construirán 208 viviendas protegidas en el municipio. El pleno también aprobó la construcción del primer aparcamiento subterráneo y un plan para eliminar las barreras arquitectónicas que perjudican a los minusválidos.
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