El abogado de Esparza tilda de "graciosa" la acusación de Roldán contra su cliente
"Novedosa, graciosa y gratuita". Con esos calificativos se refirió ayer Gonzalo Rodríguez Mourullo, el abogado de Jorge Esparza, a la tesis planteada el día anterior por Eugenio Rubio, el de Luis Roldán, en el sentido de que su cliente usó cuentas del ex director de la Guardia Civil para blanquear dinero negro procedente de sus negocios con Gabriel Urralburu, ex presidente de Navarra, y Antonio Aragón, ex consejero de Obras Públicas de esa comunidad. En la exposición de sus conclusiones definitivas ante el tribunal que juzga el caso, Mourullo se limitó a leer una línea del escrito de acusación de la trama navarra para replicar a Rubio: "Urralburu y Aragón, siguiendo instrucciones de Roldán..."Tras haber tenido que ser desalojada la sala durante dos horas -tiempo que Roldán permaneció en el coche en el que diariamente es trasladado a Madrid desde la cárcel de Brieva (Ávila)- por una falsa amenaza de bomba en el Tribunal Superior de Justicia, el defensor del ex director comercial de Huarte afirmó que el fiscal, que pide una pena de 15 años de prisión para éste, "retuerce" los hechos para sumar delitos a su causa. En su criterio, el ministerio público se basa en "datos inciertos" para construir una acusación "ficticia" contra el presunto testaferro de Roldán.
Ni estafa ni malversación
A propósito de ello, Rodríguez Mourullo sí coincidió con el letrado de Roldán en que el supuesto delito de estafa que se le imputa a Esparza en relación con el cobro de un dinero a las empresas Laín y Obrascón, adjudicatarias de un tramo de la autovía de Leizarán, por un servicio de vigilancia no realizado sería " más de lo mismo", en alusión al de cohecho. Además, indicó que los únicos puntos de apoyo al respecto son las declaraciones de sus respectivos propietarios, Enrique Aldama y José Luis Villalba, y que fueron efectuadas cuando se hallaban imputados, por lo que no estaban obligados a decir la verdad.Rodríguez Mourullo, que reclama su libre absolución, también rechazó que Esparza sea culpable de malversar fondos públicos y que su colaboración fuera necesaria para que lo hiciese Roldán. "No hay ninguna prueba, ni mínima, de cargo". En relación con la documentación interna del Banco Bilbao Vizcaya (BBV), que le atribuye determinadas operaciones, dijo que no tiene validez, "ni siquiera en el ámbito tributario". Así, concluyó que Esparza no participó en el cobro de fondos reservados, ni en metálico ni en talones del Banco de España extendidos al portador.
Antes de que la vista se suspendiera momentáneamente por el aviso de atentado, Rubio terminó, a su vez, su informe sobre Roldán expresando su firme convicción de que el ex jefe de la Guardia Civil devolvió al Ministerio del Interior los 1.700 millones de pesetas que tenía en Suiza.
El letrado, que comentó haberle visto "llorar" y recalcó que ahora vive "de su hijo y sus suegros" reprochó a la juez instructora del sumario, Ana Ferrer, que no hubiese profundizado en el cruce de cartas entre Roldán y su sucesor al frente de la Guardia Civil, Ferran Cardenal, y el que era ministro del Interior, Antoni Asunción, en torno al reintegro de ese dinero. Asimismo, Rubio se preguntó por qué el entonces fiscal general del Estado, Eligio Hernández, incluso le dio instrucciones para ello.
Todo, para apuntar que quizá no se haya querido averiguar qué fue lo que pasó realmente con tantos millones y se haya optado por pensar que, gracias a la gestión de Francisco Paesa -al que llamó "bomba viviente" por haber colaborado durante años con Interior-, han terminado en cuentas abiertas en Singapur.
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