La traición de Olga lvinskaya
La legendaria historia de amor entre el escritor ruso Borís Pasternak y la editora Olga Ivinskaya, que fue su musa, amante y modelo para el personaje de Lara en Doctor Zhivago, corre el peligro de acabar hecha pedazos. La larga batalla por hacerse con la herencia de los archivos de Pastemak ha entrado en un nuevo y feo capítulo tras conocerse, a través de un diario moscovita, que Ivinskaya delató al escritor al KGB para evitar que se publicara su famosa novela. La noticia fue recogida esta semana por The New York Times y ha provocado reacciones encontradas de los herederos de ambas partes.Pasternak era un poeta casado cuando conoció a su Lara (Ivinskaya), 20 años menor que él, en 1946. Nunca vivieron juntos. La asociación con Pasternak le costó a Ivinskaya la reclusión en el gulag en 1949 y en 1961. En la segunda ocasión, un año después de la muerte de Pasternak, Ivinskaya escribió una carta a Nikita Kruschev en la que acusaba a su ex amante para intentar que el líder soviético le rebajara la pena. "El comité central [del Partido Comunista] me pidió que evitara el contacto de Pasternak con extranjeros y yo hice todo lo que pude", escribió Ivinskaya en la carta que acaba de conocerse.
Refiriéndose al intento del partido de evitar la publicación de Doctor Zhivago, Ivinskaya dijo a Kruschev: "Hice todo lo que estaba dentro de mis posibilidades para evitar una catástrofe, pero estaba más allá de mi poder el neutralizarlo todo a la vez. Me gustaría aclarar que fue Pasternak por sí mismo quien escribió la novela, fue él quien recibió dinero a través de un medio de su elección. No se le debería considerar como un corderito inocente".Doctor Zhivago, un romance épico casi autoblográfico con la Revolución Rusa y la I Guerra Mundial de fondo, se publicó en 1957, pero no pudo ver la luz en Rusia hasta 1988. En 1965, David Lean la llevó al cine con Omar Sharif y Julie Christie en los papeles principales.
La carta, desvelada por el diario Moskovsky Komsomolets, no apunta sólo a lo que podría ser el descubrimiento de una traición de dimensiones novelescas de lo que fue un famosísimo romance, sino que también puede cambiar el curso de la polémica sobre los archivos de Pasternak, confiscados por el Partido Comunista por incitar supuestamente a la insurrección, pero que también incluyen la correspondencia entre ambos, considerada un tesoro de la literatura rusa. El hijo de Pasternak ha manifestado a The New York Times su disgusto por el sensacionalismo con el que se presen ta la tragedia de Ivinskaya.
Hay indicios también de que ella delató a más gente. Sin embargo, su hija, Irima Yemelyanova, alega que la carta a Kruschev refleja sólo una necesidad desesperada de salir del gulag por cualquier medio, recurriendo a una táctica acusatoria que siguieron miles de personas internadas en esos campos de concentración.
Académicos y expertos, incluyendo los de archivos nacionales de arte y literatura, donde se guardan esos valiosisimos papeles, creen que la polémica carta demuestra que los herederos de Ivinskaya, que viven en París, no tienen derecho a hacerse con ellos. Iviriskaya ganó una demanda sobre esos archivos en 1992, pero los herederos de Pasternak la recurrieron. Ivinskaya murió en 1995 y la disputa sigue pendiente. La familia, de Pasternak y los archivos rusos no quieren que el material salga de Rusia y acusan a la familia de ella de querer sacar dinero al material, en forma de libro o exclusiva. Recientemente intentaron subastar cartas entre los dos amantes, sin éxito.
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