Un nuevo accidente eleva a 39 los obreros muertos en el tajo este año

Las muertes en la construcción no cesan. Ángel Luis Adrián, soldador, de 54 años, falleció el pasado miércoles en Alcalá de Henares (160.000 habitantes) al caer desde una escalera metálica. Esta nueva víctima eleva a 39 los obreros de la construcción fallecidos en 1997 en la región. La cifra, facilitada por la Consejería de Economía y Empleo, supera las, registradas en los últimos cinco años. Aún así, los sindicatos CC 00 y UGT consideran que el número de muertos en el tajo es superior y que puede rondar los 43.

Para los sindicatos, este trágico aumento en los accidentes laborales en la construcción se debe a fallos en las tareas de control de la Administración -la Comunidad de Madrid tiene asumidas las competencias en el sector desde 1996- y al aumento de la presión empresarial sobre los trabajadores.

El último accidente mortal registrado en la región ocurrió en el polígono industrial Santa Rosa. El obrero, según la primera versión de la inspección de Trabajo, sufrió un desvanecimiento cuando se disponía a bajar la escalera desde la que estaba trabajando en una soldadura. Perdió entonces el equilibrio y cayó de cabeza desde una altura de tres metros. Las heridas producidas por el golpe acabaron con su vida.