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TERRORISMO ISLÁMICO EN EGIPTO

Las agencias de viaje españolas no asumen los riesgos de los turistas con destino a Egipto

Los grupos de turistas españoles que tenían previsto salir ayer hacia Egipto recibieron de las agencias de viajes un claro mensaje: o renunciaban al viaje o firmaban un documento en el que asumían el riesgo que pueden contraer al viajar a Egipto. La práctica totalidad le los grupos decidieron no viajar ante el riesgo latente tras el atentado. Los principates países europeos cancelaron sus reservas y comenzaron los trámites para repatriar a sus turistas. Mientras tanto, las autoridades turísticas egipcias trataban de tranquilizar en la medida de lo posible a los potenciales visitantes.

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El ministro de Turismo de Egipto, Mamdou al Beltagi, trató ayer en Londres de dar un mensaje de esperanza tras reconocer que estaba muy afectado por lo sucedido. "No sé que puede pasar en el futuro del sector tras este atentado, pero puedo asegurar que las autoridades egipcias harán todo lo posible para garantizar la seguridad de los turistas", señaló.Las agencias de viaje suizas trataban ayer de organizar el regreso de los turistas tras el atentado que causó más de 60 muertos cerca de Luxor. La práctica totalidad de los operadores de viajes organizados desde los países escandinavos (Suecia, Noruega, Finlandia y Dinamarca) han decidido suspender todas las reservas que tenían en Egipto y repatriar a sus turistas.

En esta línea trabajaban las agencias británicas, las austriacas y las francesas, para quienes en estos momentos lo importante es no perder la calma tras lo sucedido. El Gobierno alemán ha puesto en guardia a los turistas alemanes ante los riesgos que pueden correr en algunos países extranjeros.

Egipto se ha convertido en los últimos años en uno de les países favoritos de los españoles. Según las cifras recogidas en el Anuario Estadístico de la Organización Mundial de Turismo, en el año 1991 se desplazaron a Egipto 51.840 turistas españoles, cifra que sé incrementó un año después hasta los 84.172. Sin embargo, la gran depresión que sufrió la economía española en el año 1993 rebajó la cifra de turistas hasta los 22.114. En el año 1994 la cifra siguió cayendo hasta los 14.460 turistas para retomar la curva ascendente en el año 1995 (23.484 turistas) y en el año 1996 (27.489).

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El director general de la Asociación Española de Agencias de Viaje (AEDAVE), Félix Arévalo, regresó hace dos días de Egipto, país que a su juicio está haciendo un gran esfuerzo en la promoción de sus zonas turísticas. Arévalo se ha entrevistado con el ministro de Turismo, Mamdou al Beltagi, quien le comunicaba con alborozo que España era el primer país con un mayor crecimiento de turistas con destino a Egipto. Y para demostarlo le exhibió unos cuadros en los que observaba que en los 10 primeros meses del presente año el aumento de turistas ha sido del 77% sobre el mismo periodo del año anterior.Sin embargo, el atentado del pasado mes de septiembre ya metió el miedo en el cuerpo a los españoles, que comenzaron a cancelar sus reservas de forma clara. El propio Arévalo reconoce que habían hablado ayer con las autoridades turísticas de Egipto y que el pesimismo era total. El atentado de Luxor ha echado por tierra la labor de varios años y sus repercusiones son de incalculables consecuencias, según informaron al directivo español.

Según Arévalo, este tipo de sucesos debieran ahondar en el debate sobre la necesidad de los organismo públicos españoles se planteen crear un organismo que de forma permanente ofrezca una información detallada sobre los riesgos políticos o de seguridad que puede existir para los turistas en determinadas zonas o países.

El atentado ha sido un tiro en el corazón de la primera fuente de ingresos de la economía egipcia: el turismo. De los 2.156 millones de dólares (unos 312.620 millones de pesetas al cambio actual) de 1992 se pasó a los 1.345 millones de dólares en el año 1994 y a los 1.490 millones de dólares del año 1996, según los datos facilitados por la oficina de Turismo de Egipto, dependiente del Gobierno egipcio.

Negocio en expansión

La progresión de las cifras del negocio turístico ha sido clara. De los 2.600.135 turistas procedentes de todo el mundo que entraron en Egipto en el año 1990, se pasó a los 3.133.413 del año 1995. El pasado año, 3.895.940 turistas optaron por visitar el país que atraviesa el Nilo. En 1996 visitaron Egipto 436.000 turistas alemanes, 360.000 italianos, 328.000 británicos, 321.000 israelíes y 242.000 fanceses. Hasta el pasado mes de junio, el crecimiento del turismo sobre el mismo periodo del año anterior era del 228%, según las cifras de la Oficina de Turismo.El Gobierno egipcio había encontrado una moderna gallina de los huevos de oro al convertir este destino del extremo del Mediterráneo en una opción competitiva al unir atractivo histórico, mediana infraestructura de servicios y precios asequibles. Egipto mantiene una pugna directa para atraer turistas con focos como Turquía, Túnez y Marruecos, y el Ministerio de Turismo se había convertido en uno de los pilares para el desarrollo económico.

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