_
_
_
_

Los caminos entrecruzados

En la historia de ETA hay también caminos entrecruzados. Algunos chavales se iniciaron en el activismo cuando sus padres habían decidido reinsertase. A veces, la implicación del hijo ha llevado a sus padres a reconsiderar su pasado.Es el caso de la familia González Arrizubieta. Jon Ander González tenía 9 años cuando sus padres, miembros de los Comandos Autónomos Anticapitalistas, fueron encarcelados en 1986 por el secuestro del empresario de Azpeitia Ángel Carasusan. Sus padres enviaron a Jon Ander a una colonia de verano y a su hermana menor a la casa de los abuelos para poder esconder al secuestrado en su piso de Lezo (Guipúzcoa). Carasusan durmió en la habitación de Jon Ander hasta que la Guardia Civil lo rescató seis días después.

Más información
Relevo familiar en las filas de ETA

Hasta el verano de 1991, en que su padre comenzó a disfrutar del tercer grado penitenciario, Jon Ander sólo lo había visto entre rejas. Continuó visitando así a su madre hasta que él mismo fue detenido en marzo de 1995, con 19 años, por participar en el ataque a una furgoneta de la Erzaintza en Rentería, en el que resultó abrasado el agente Juan José Ruiz Sagarna.

Este episodio, por el que fue condenado Jon Ander, impactó a su madre que, meses después obtuvo el tercer grado y desde hace un, año disfruta de libertad. Ahora, son los padres quienes visitarán en la cárcel a su hijo hasta el final de la condena de 12 años por homicidio frustrado.

Francisco Javier Rezola Urdangarín es de Tolosa, tiene 21 años y ha estado dos, desde 1993 hasta 1995, en varias cárceles, pendiente de un juicio que determinará su colaboración o pertenencia a banda armada. Para cuando él iba, su padre volvía ya. Juan Antonio Rezola San Vicente, de 42 años, disfrutaba del tercer grado desde 1990, después de seis años de prisión cumpliendo una condena de 30 años por atentado. y asesinato, cuando su hijo fue detenido en junio de 1993.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_