El Gobierno se echa atrás en la ley de asilo y en el decreto del himno

Rectificación por partida doble. El Consejo de Ministros de ayer asumió con ánimo de enmienda las duras críticas suscitadas en el Parlamento por su proyecto de ley que permitía expulsar a asilados políticos y corrigió los aspectos más polémicos del decreto que regula el himno nacional, el cual ya no habrá que escucharlo obligatoriamente en pie y sonará sólo "cuando proceda". En ambos casos la oposición de sus socios nacionalistas ha sido determinante para que el Ejecutivo diera marcha atrás.

Las modificaciones en el proyecto de Ley Orgánica de Cooperación Jurídica Internacional en Materia Penal serán las que hagan falta. Según confesó la propia ministra de Justicia, Margarita Mariscal, al término del Consejo de Ministros, el "proyecto está ahí para enmendarlo" en el Congreso. Mencionó expresamente los artículos mas duros, el 13 y el 34. CiU, que el jueves votó contra la devolución del proyecto, había ya anunciado la presentación de un centenar de enmiendas.El decreto que regula el himno nacional ya no obliga ni a que suene en todos los actos a los que asista el presidente del Gobierno ni a que los asistentes tengan que permanecer en pie. Además, sólo será interpretado "cuando proceda", fórmula ésta con la que el Gobierno evita el conflicto con sus socios del PNV y CiU.

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