El astronauta Wolf se declara feliz en la'Mir' aunque tenga que dormir 'en el pasillo'
Foale recoge las plantas que traerá a la Tierra para que se analice cómo han crecido
Dave Wolf el astronauta norteamericano recién llegado a la Mir, se siente feliz en el apartamento de sus colegas rusos, aunque las deficiencias en la estación. orbital le obliguen a dormir en un pasillo. Los diez astronautas que están en órbita desde el sábado, cuando el Atlantis se acopló a la Mir formando un complejo de unas 240 toneladas, continuaron ayer descargando los equipos que llevó a la estación rusa el transbordador estadounidense. Michael Foale, que debe regresar a la Tierra en el Atlantis después de cuatro duros meses en órbita, se pasó la mayor parte del día de ayer recogiendo las plantas que se llevará a asa para ver cómo influye en ellas el haber ido cultivadas en la ingravidez.
El relevo oficial de Foale se produjo el domingo; y ahora David Wolf, que deberá quedarse en la Mir hasta enero próximo, se está acostumbrado a sus nuevos aposentos. Antes del choque ocurrido el 25 de junio pasado, los astronautas de la NASA en la Mir vivían en el Spektr, donde se encontraba la mayoría de los equipos estadounidenses, pero desde esa fecha ese módulo está despresurizado, clausurado e inhabitable. Wolf ha elegido como dormitorio el pasillo que hay en el módulo Kvant-2.El único problema consiste en que por allí salen los astronautas a sus paseos espaciales, así es que, cada vez que esto ocurra, Wolf deberá recoger sus pertenencias para dejar la vía libre.
1 Y eso le sucederá por primera vez mañana, cuando el veterano cosmonauta ruso Vladímir Titov -de 50 años, con más de un año en el espacio a sus espaldas- y el ingeniero de vuelo del Atlantis Scott Parazynski salgan al vacío para recoger muestras adheridas a la carrocería de la Mir colocadas anteriormente para ver cómo influyen las severas condiciones del espacio abierto en materiales aeroespaciales.Además, Titov y Parazynski tratarán de encontrar el o los agujeros causados por el choque de la nave de carga en el Spektr, que Foale y el comandante de la Mir, Anatoli Soloviov, no lograron descubrir en su paseo espacial de hace 25 días. Por lo demás, Wolf está feliz. "Ésta es una habitación con vistas. Hay una ventana en cada uno de los cuadrantes. Ya sólo esto es suficiente para querer estar aquí. Es formidable", dijo entusiasmado Wolf sobre su nueva casa.
Lo más urgente ahora es montar y poner en funcionamiento el nuevo ordenador que llevó el A tlantis mientras éste se encuentre acoplado a la Mir y pueda dirigir la posición de la estación orbital. La operación -que un astronauta puede completar en cosa de hora y media- se hará también mañana, inmediatamente después del paseo espacial de Titov y Parazynski.
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