El PSOE elogia al general, el PNV lo ve bien en la cárcel y el Gobierno calla

El ingreso en prisión del general de la Guardia Civil Enrique Rodríguez Galindo generó un elogio del PSOE hacia su figura, el silencio por parte del Gobierno y del PP y un duro ataque de Izquierda Unida y Eusko Alkartasuna. El PNV y CiU lo consideran normal y correcto.Juan Manuel Eguiagaray, portavoz socialista en el Congreso, alabó la tarea que desarrolló Galindo al frente del acuartelamiento de Intxaurrondo, en San Sebastián, y aseguró que la sociedad debe valorar su trabajo frente a los que intentan plantear el caso GAL como un proceso contra los socialistas.

El portavoz de Interior del PP, Ignacio Gil Lázaro, se limitó a declarar que se trata de una cuestión de procedimiento sobre la que su partido no hace valoraciones políticas.

La ministra de Justicia, Margarita Mariscal" a la salida del acto de apertura del Año Judicial, manifestó: "Si cada vez que un juez toma una decisión se la tilda de política en vez de jurídica, evidentemente vamos por muy mal camino".

Por parte de IU hablaron Rosa Aguilar, portavoz en el Congreso; Willy Meyer, portavoz de Interior, y el coordinador de la coalición en Andalucía, Antonio Romero.

Aguilar declaró que la actitud de Galindo "es un gesto para generar la confianza de sus subordinados y mantener el pacto de silencio". Para la portavoz de IU, el general debe "declarar todo lo que sabe sobre la trama GAL", ya que "su deber es contar la verdad"

Dialéctica joseantoniana

Las declaraciones más virulentas partieron de Meyer al manifestar a Servimedia que Felipe González utilizó "la dialéctica joseantoniana del puño y las pistolas desde el Ministerio del Interior para intentar derrotar a ETA con sus mismos medios: la extorsión, la tortura y el asesinato".

Según este diputado, las declaraciopnes del ex agente Felipe Bayo han dado "un vuelco espectacular" al caso: "Estamos muy cerca de señalar con mucha más rotundidad a la cúpula de Interior y, por tanto, queda absolutamente claro que el anterior presidente del Gobierno, por acción u omisión, es el responsable de llevar adelante la dialéctica del puño y las pistolas".

Para Romero, se investigan hechos muy graves, cometidos por servidores públicos, y hay que exigir "mayor ejemplar¡dad". "Respetamos la decisión de Javier Gómez de Liaño en este caso", dijo.

Para Begoña Lasagabaster, diputada de Eusko Alkartasuna (EA), la decisión de Galindo demuestra que el GAL fue terrorismo de Estado.

La portavoz de Interior del PNV en el Congreso, Margarita Uría, vio bien que Galindo reingresara en prisión porque se le relaciona con delitos muy graves. En esa línea, Ignasi Guardans, diputado de CiU, indicó que "es normal que una persona inmersa en una investigación y con unos testimonios en su contra tan importantes o bien pague la fianza o esté en la cárcel".