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Y las cajas de ahorro, ¿qué?

Las cajas de ahorro no van a estar quietas. Parece inevitable que su número,50 en estos momentos, se reduzca drásticamente en los próximos años por la vía de las fusiones. Y ya se verá si no compran redes bancarias o aumentan su red de sucursales.La unión de las tres cajas vascas (BBK, Kutxa y Vital), de las gallegas (Caixa Galicia, Vigo y Pontevedra) o las valencianas (Bancaja y la Caja de Ahorros del Mediterráneo, entre otras) parecen los procesos con más visos de llegar a buen puerto. No obstante, la asignatura pendiente del sector es la fusión entre cajas de distintas comunidades atónomas.

A favor, con mayor o menor o tibieza, ya se han manifestado tanto el presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA), Braulio Medel, como el de Cajamadrid, Miguel Blesa. La traba -no hay ninguna jurídica- es la de siempre: el reparto del poder político.

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La obsesión del tamaño

Además, las cajas, especialmente las de mayor tamaño (La Caixa, Cajamadrid, Caixa Cataluña ... ) afrontarán un fenómeno que no es nuevo: su participación en las empresas privatizadas.

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