Iberia deja en tierra a 188 viajeros al haber vendido más pasajes que plazas disponibles
Un total de 188 pasajeros que se disponían a viajar en distintos vuelos de la compañía, Iberia toparon ayer con una sorpresa inesperada. Se quedaron en el aeropuerto de Barajas mientras su vuelo despegaba. El motivo: un overbooking o sobreventa de las plazas del avión, una política legal pero que, como quedó demostrado ayer, tiene sus riesgos. Un empleado de la compañía sufrió en su rostro el enfado de algún pasajero. Otros 20 turistas que permanecían desde hacía seis días en un hotel por sufrir el mismo problema partieron también ayer hacia su destino.
Los pasajeros que se quedaron en tierra habían comprado una reserva para vuelos de Iberia con destino a Buenos Aires Santiago de Chile, Río de Janeiro y Caracas. Les sorprendió el overbooking. O lo que es lo mismo, una sobreventa de las reservas del vuelo. Según la compañía Iberia, este tipo de política de ventas es una práctica legal y habitual entre las distintas compañías aéreas. Las empresas venden un exceso de reservas con el fin de asegurarse de que los vuelos despegarán llenos. De esta manera, evitan perder dinero con las cancelacíones de última hora."Cada pasaje de avión es muy caro. El overbooking es una forma legal de no jugarnos el dinero", aseguraba ayer una portavoz de Iberia.
Según una normativa europea, las compañías aéreas están autorizadas a reservar hasta un 10% más de la capacidad del pasaje. Desde Iberia aseguraron: "No suelen existir problemas porque, aunque estemos llenos, la competencia suele tener plazas libres y se soluciona el tema, pero hay días en que existe riesgo". Y ayer fue uno de ellos.
De los 188 pasajeros afectados ayer por las sobreventas, 99 se disponían a viajar a Buenos Aires. El resto, 89 viajeros, habían programado aterrizar en Río de Janeiro, Caracas y Santiago de Chile.
Agresiones al personal
El malestar entre los usuarios era latente ayer en la terminal aérea. "Es una vergüenza lo que ha pasado. Están jugando con nosotros", comentaba una chica que se disponía a viajar a Caracas. "Ahora tendré que esperarme dos días aquí con los brazos cruzados", señalaba indignada.Un empleado de Iberia señaló que algunos supervisores de la compañía sufrieron agresiones por parte de algún que otro usuario. "Comprendemos que los retrasos suponen molestias, pero intentamos paliarlas lo antes posible", añadió.
De este modo, Iberia aseguró que todos los viajeros afectados podrán partir hacia sus destinos hoy mismo. Fuentes de la compañía confirmaron que los pasajeros que se dirijan a Buenos Aires podrán tomar el primer vuelo regular de hoy. Además, otro vuelo especial partirá también hoy con destino a Río de Janeiro y Santiago de Chile.
Un portavoz de Iberia confirmó que las personas afectadas por la saturación en las reservas "recibirán la correspondiente compensación económica".
En los vuelos de más de 3.500 kilómetros y con un retraso en la salida superior a las cuatro horas, la compañía contempla una compensación de 300 ecus (49.800 pesteas), aunque muchos de los sufridos viajeros lo desconocen. "No me han dicho nada de indemnizaciones, pero me da igual. Lo que quiero es marcharme mañana mismo a Buenos Aires y dejarme de follones", comentaba un matrimonio argentino.
Además de la indemnización económica, Iberia corrió con los gastos de hotel y de mantenimiento (comida, bebida y llamadas de teléfono) de los viajeros.
Por su parte, ayer abandonaron Madrid con destino a Buenos Aires un grupo de 20 turistas que permanecían bloqueados en un hotel desde hacía seis días. Otro overbooking, esta vez de la compañía aérea Pluna, truncó la tranquilidad de sus primeros días de vacaciones.
Los pasajeros tenían pagados y cerrados sus correspondientes pasajes desde hacía tres meses. A pesar de que no tuvieron queja alguna con los empleados de Pluna, sí se mostraron contrariados con la actitud de la compañía.
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