Un ministro de Marruecos admite la existencia de compra de votos

El ministro marroquí de la Vivienda, Said el Fasi, ha reconocido que, en las elecciones municipales del pasado 13 de junio, varios candidatos compraron con dinero votos de electores. En sus declaraciones -publicadas en la última edición del semanario Maroc Hebdo, que ayer salió a la venta-, un miembro del actual Gobierno confirma por primera vez las acusaciones de los partidos de la oposición, que denunciaron que la Administración marroquí no controló las irregularidades en los comicios.

Said el Fasi, cuya candidatura fracasó en la localidad de Buznika (en la región de Rabat), revela en la entrevista concedida a Maroc Hebdo: "No me eligieron porque rechacé todas las tentativas de soborno de los votantes". Y agrega: "Hay votantes que me pidieron 1.000 dirhams (unas 15.000 pesetas), y otros, 2.000 dirhams".

El ministro asegura que todos los partidos marroquíes, tanto de "la derecha como de la izquierda", utilizaron dinero para comprar votos en las elecciones municipales. El Fasi, miembro de la dirección del partido Unión Constitucional (UC, mayoritario en la actual coalición gubernamental), fue agredido y golpeado por sus adversarios políticos en Buznika durante la campaña.

Las elecciones locales marroquíes se rigen por el sistema de escrutinio uninominal, circunstancia que, según los partidos de la oposición, facilita la compra de votos. Antes de que se celebraran los comicios, el rey Hassan II se comprometió a garantizar la limpieza del escrutinio. Los partidos políticos acordaron con el Gobierno el pasado mes de marzo el llamado "pacto de honor de limpieza y buena conducta", para erradicar las irregularidades electorales.

Los comicios municipales del pasado mes de junio fueron considerados como un ensayo general de las legislativas previstas para el próximo otoño, que culminarán el proceso de democratización de las instituciones del país magrebí, iniciado en 1996 con el referéndum constitucional que aprobó un nuevo sistema bicameral.