El Partido Popular esperará a que la condena sea firme para que actúe su comité de disciplina regional

El coordinador general del PP, Ángel Acebes, se limitó ayer a reiterar la posición oficial del partido al que aún pertenece Gabriel Cañellas sobre cualquier tipo de resolución o sentencia judicial: "Lo que vamos a hacer es lo que venimos diciendo desde el primer día, tanto en este caso como en otros: acatar y respetar absolutamente la decisión de los jueces y de los tribunales". Acebes sólo se permitió añadir que el fallo de la sentencia es, en cualquier caso, absolutorio y que las responsabilidades sobre el delito de cohecho ya prescrito se incluyen en los considerandos.Este matiz podría salvar a Cañellas de la expulsión inmediata del PP.

La dirección nacional del PP, de cualquier forma, esperará a que la sentencia contra el ex presidente balear y su ex consejero y ex secretario regional del partido, José Antonio Berastáin, sea firme, porque ya se han anunciado varios recursos contra ella desde distintas partes. También se aguarda incluso un recurso de los abogados del propio Cañellas. Entonces se comentará y, sobre todo, se pondrá en marcha el comité de disciplina regional del partido en Baleares, organización a la que le compete decidir en este caso al considerarse ahora a Gabriel Cañellas como un simple militante de base. El comité de disciplina nacional sólo interviene en el supuesto de altos cargos y dirigentes nacionales.

El PP entiende que tanto Cañellas como Berastáin asumieron ya en su día "importantes responsabilidades políticas", que son las que en teoría correspondía imponer desde la dirección nacional. Ahora limitan el asunto primero a lo que planteen los propios afectados y, en su defecto, los órganos regionales.

Los estatutos del partido fijan la expulsión inmediata para los casos de militantes sobre los que pese una sentencia firme y condenatoria. La dirección nacional del PP concluye que éste no es aún el caso de Cañellas y Berastáin. Primero porque la sentencia se piensa recurrir y segundo porque en su fallo, -"que es la parte dispositiva", subrayó Acebes- se absuelve a los dirigentes a pesar de determinar que cometieron un delito de cohecho "en los considerandos". Ese delito prescribió al haber transcurrido más de cinco años. Este matiz es el que puede salvar oficialmente la militancia de Cañellas y su ex consejero.