Baker presenta a puerta cerrada ante el Consejo de Seguridad su propuesta de paz para el Sáhara

James Baker, nombrado mediador de la ONU para el conflicto del Sáhara occidental por Kofi Annan, presentó ayer a puerta cerrada, en el Consejo de Seguridad, los resultados de las conversaciones directas que Marruecos y el Frente Polisario sostuvieron en Londres el pasado fin de semana. Antes, el ex secretario de Estado norteamericano había almorzado con Annan para informarle personalmente. Al cierre de esta edición, no habían trascendido detalles, pero Baker había adelantado que la "fórmula de compromiso" sobre el censo aceptada en Londres no es definitiva hasta que las partes hayan alcanzado un acuerdo global sobre otros aspectos del conflicto.

A la salida de la reunión, Baker no dio detalles sobre el acuerdo alcanzado en Londres porque ,les confidencial y esta sujeto al futuro entendimiento entre las partes", pero reconoció que "la sesión ha sido productiva y las partes han decidido abandonar algunos aspectos de sus posturas tradicionales". No obstante el mediador estadounidense no quiso parecer demasiado optimista: "El plan es complejo y sería una locura y decir que podemos cumplirlo con los progresos que hemos hecho", afirmó.Las conversaciones del fin de semana concluyeron, según se informó en la capital británica, con el anuncio de que ambas partes habían aceptado la "propuesta de compromiso" de Baker para desbloquear el contencioso sobre el número y la identidad de los votantes en el referéndum de autodeterminación que debe celebrarse en la ex colonia española. Desde el alto el fuego de 1991, el proceso de paz en el Sáhara está en punto muerto por la polémica entre Rabat y el Polisario sobre quién debe ser considerado. saharaui a la hora de participar en la consulta.

Marruecos argumenta tradicionalmente que el censo español de 1974, que identifica a unas 75.000 personas, se quedó cojo, puesto que en aquel momento había muchos saharauis que, por razones políticas o económicas, no vivían en el territorio. El Polisario ya aceptó en su momento la ampliación del número de votantes, pero la lista presentada por Rabat -con más de 100.000 personas no inscritas en el censo español- siempre le ha parecido muy exagerada.

Baker adelantó que la ONU no piensa hacer públicos los detalles de ese acuerdo de principio sobre el censo hasta que las, partes no hayan encontrado también soluciones para los otros problemas que bloquean la resolución del conflicto: prisioneros de guerra, refugiados, confinamiento de las tropas...

"Estamos actuando bajo un procedimiento según el cual no hay acuerdo definitivo sobre nada hasta que haya un acuerdo sobre todo", dijo James Baker.