Los socialistas ven insuficiente el plan de reforma de la justicia de Chirac
El Partido Socialista, al frente del Gobierno, ha calificado de "timorata" la propuesta de reforma de la justicia presentada ayer por la llamada comisión Truche, que ha trabajado por encargo del presidente Jacques Chirac. Aunque la titular de Justicia, Elisabeth Guigou, considera que "algunas de las medidas van en dirección de lo que pretende el Gobierno", el conjunto no ha sido bien recibido, porque se considera que no se cortan los vínculos políticos entre la fiscalía del Estado y el Ministerio de Justicia.
"La medida propuesta es totalmente hipócrita", ha dicho el izquierdista sindicato de la magistratura al referirse a una nueva norma que prohibe Ias instrucciones individuales" del ministro, pero admite "la concertación con la fiscalía". Algunos jueces temen que el supuesto respeto del ministro a la independencia de la justicia sea sólo meramente formal.Las propuestas destinadas a recortar las atribuciones de los jueces instructores en cambio si han merecido el aprobado. A partir de ahora, la detención provisional deja de estar en manos del instructor y sólo pueden decretarla otros tres jueces ajenos al caso. "Había que acabar con la utilización de la amenaza de prisión como una forma de chantaje para conseguir declaraciones" ha dicho el sindicato de abogados.
También se considera muy positivo el que se exija a los jueces instructores que realicen su trabajo de acuerdo con un plazo de tiempo previamente establecido. "Hay sumarios que se eternizan, que tardan más de diez años en instruirse, y eso es escandaloso",- comentaba el presidente del sindicato de abogados el mismo día en que se comunicaba que el juicio contra Maurice Papon por "crimen contra la Humanidad" comenzará el próximo 8 de octubre, más de 15 años después de que se abriera el sumario. Al margen de las razones políticas para prolongar una instrucción, existen también causas económicas. El antiguo ministro socialista de Justicia, Robert Badinter, ha recordado que algunas de sus reformas aprobadas para democratizar el sistema judicial nunca se han podido aplicar porque no se han votado los créditos necesarios para hacerlas efectivas.
La nueva composición del Consejo Superior de la Magistratura, con sus siete miembros no jueces (dos nombrados por el presidente de la República, otros dos por el presidente de la Asamblea Nacional, una tercera pareja por el del Senado y el séptimo por el Consejo de Estado) y seis magistrados, también ha sido aplaudida porque "evita el corporativismo y, al tiempo, garantiza la independencia y pluralismo político".
La prensa contempla en cambio con mucha inquietud el :que, para mejor garantizar la presunción de inocencia, se Prohiba mencionar los nombres de las personas que tienen un sumario abierto hasta el momento de su inculpación. "Es una propuesta liberticida", ha dicho el sindicato de periodistas CGT, que "pretende amordazar la prensa".
Los policías, que verían su acción más controlada por los jueces de aplicarse las ideas de la comisión Truche, han protestado ante la perspectiva de que los detenidos tengan asistencia letrada desde el primer momento y no tras veinte horas de detención, como ocurre ahora.
