Fraga propugna el "diálogo" con ETA tras aplicar con la ley "cirugía de urgencia"
C.V.El presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, propugnó ayer en Madrid el "diálogo y la negociación política" para combatir el terrorimo, pero después de aplicar, en primer lugar, "cirugía de urgencia; es decir, acción policial y judicial". Sólo después, recalcó Fraga, que hizo mención expresa al uso de medios democráticos y constitucionales para combatir uno de los tres problemas que él coloca en cabeza de las preocupaciones de nuestro país: terrorismo, paro y esterilidad; es decir, cuotas bajísimas de natalidad.
Antes de comenzar la conferencia, Fraga hizo unas breves declaraciones en las que siguió la misma línea que el presidente del Congreso, Federico Trillo, en la entrevista que concedió a EL PAÍS el pasado domingo, sobre las responsabilidades políticas del Gobierno socialista en el caso GAL. Según Fraga, las responsabilidades políticas "como conjunto, para un Gobierno derrotado, para una mayoría que deja de serlo, evidentemente quedan delimitadas". "Luego, si hay otras responsabilidades, otros tienen que delimitarlas", dijo, en clara alusión a las judiciales.
El presidente de la Xunta pronunció una conferencia organizada por la Fundación Círculo de Lectores con el título España, una y varia, en un mundo en cambio, dentro del Cielo Nuevas visiones de España. No asistió ni un solo dirigente del Gobierno ni del Partido Popular.
Fraga se mostró convencido de que España atraviesa un buen momento y que la estabilidad está asegurada, al menos para los próximos cincuenta años. Sin embargo quiso, desde el principio, advertir que es necesario un serio "rearme moral" si se quiere sacar al país "del problema global más grave que afronta, que es la desidentificación política especulativa unida a una práctica atonía moral".
Definió a España como "una comunidad política compleja, formada por la agregación de otras varias comunidades políticas igualmente complejas que hasta aquí han ido evolucionando con éxito".
La organización autonómica supone para Fraga una exigencia constante de "revisión del capítulo constitucional" para "perfeccionar el Estado de las Autonomías". Incluso precisó que es necesaria una reforma urgente "del Título VIII de la Constitución y la legislación que lo desarrolla en lo que se refiere al Senado, la Conferencia de Presidentes, la Administración" y otros.
Cree necesario el principal mandatario gallego "la reafírmación de la integración europea con la entrada en la moneda única y la reforma del tratado de Maastricht, buscando una mayor aplicación de los principios de subsidiariedad y solidaridad" y, por fin, "la concertada acción social y pública dirigida a producir un rearme moral que vivifique la familia y extinga la hoy demasía do extendida corrupción".
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