Un nuevo mapa del islamismo

J. C. S. Con las cauciones que obligan a tomar las denuncias de fraude electoral, las elecciones parecen dibujar un nuevo mapa del islamismo en Argelia. En el centro del país, feudo del integrismo y principal escenario de las matanzas de civiles, los partidos islamistas -el Movimiento de la Sociedad por la Paz (MSP) y Ennahda- han logrado menos de una quinta parte de los sufragios. Sus resultados en wilayas como Blida, Medea o Argel reflejan un fuerte retroceso respecto a la abrumadora victoria que obtuvo allí el ilegalizado Frente Islámico de Salvación (FIS) en los comicios abortados por el golpe militar de 1992.

En contrapartida, el MSP y Ennahda han cobrado peso electoral en áreas urbanas e industriales del este del país. Pero su avance más sorprendente lo han experimentado en la cosmopolita Orán, donde el partido del jeque Mahfud Nahna ha sido el más votado. También han alcanzado presencia en el sur. Los analistas atribuyen el cambio al éxodo de la población rural hacia las ciudades de la costa y a la sedentarización de los nómadas.