"Dominante" hasta el 2005

Telefónica tendrá la consideración de "operador dominante" en el mercado español de las telecomunicaciones hasta el año 2005 por lo menos. Ese año es posible que alguna de las compañías que hayan decidido competir con Telefónica tenga ya un 25% del mercado en zonas determinadas.Si es así, la empresa en cuestión obtendrá la consideración de "operador dominante", lo que la obligará a garantizar el servicio telefónico universal a los ciudadanos de la región, según se recoge en el anteproyecto de ley General de Telecomunicaciones elaborado por el Gobierno.

El anteproyecto entiende por servicio universal de telecomunicaciones "un conjunto de servicios [transmisión de voz, fax y datos, guía telefónica, cabinas y equipos para discapacitados] con una calidad determinada, accesible a todos los usuarios con independencia de su localización geográfica y a un precio asequible".

El texto del anteproyecto de ley General de Telecomunicaciones ha pasado ya el examen del Consejo de Estado y está listo para ser debatido en Consejo de Ministros. Todo indica que el Gobierno lo aprobará antes de que se celebre el debate sobre el Estado de la Nación, previsto para los próximos días 11 y 12 de junio, para que José María Aznar pueda presentar la ley como uno de los logros de su gestión.

El anteproyecto consta de 85 artículos y su objetivo es "promover la competencia", según consta en el texto. Además, impone una serie de obligaciones sobre servicio público "para garantizar la protección del interés público en un entorno liberalizado". Este año, Retevisión empezará a competir con Telefónica en telefonía fija y en 1998 lo harán las compañías de televisión por cable.

El texto del anteproyecto no prevé, sin embargo, que un sólo operador arrebate a Telefónica más del 25% del mercado antes del 2005. "Se entenderá que el operador dominante es Telefónica", dice el texto de la norma. No obstante, "la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones [CMT] determinará si desde ese año la citada sociedad conserva o no en cada ámbito territorial esa consideración".

La normativa ha previsto la creación de un fondo nacional, de forma que el coste de prestar el servicio universal sea compartido por todas las operadoras en el mercado. Para que la CMT distribuya fondos a las compañías que presten esos servicios será necesario que éstas presenten una contabilidad separada en la que quede claro cuál es el coste real del servicio universal. El Ministerio de Fomento se ha quejado reiteradamente de que Telefónica no presenta una contabilidad separada y clara.

Los recursos de la CMT "estarán integrados, entre otros, por los ingresos obtenidos por la liquidación de tasas, cánones y precios públicos" que habrán de pagar las compañías por utilizar, por ejemplo, los recursos públicos de numeración telefónica, que otorgará Fomento.