Los tres policías que detuvieron a Elejalde declaran que hubo un forcejeo

Los tres policías que detuvieron en San Sebastián al activista de ETA Fernando Elejalde, presunto asesino del funcionario de prisiones Javier Gómez Elósegui, declararon ayer ante el juez que la detención fue violenta y que llegó a haber forcejeo con el detenido. Elejalde fue arrestado por tres agentes del Cuerpo Nacional de Policía minutos después de haber asesinado al psicólogo de la prisión de Martutene.Como consecuencia de las lesiones que padecía, el activista de ETA fue trasladado a un centro sanitario dos días después del atentado. Las heridas, según los testimonios de los policías, se produjeron durante la detención. Elejalde mantiene, según su abogado, que en la detención no hubo forcejeo y que fue objeto de malos tratos durante el tiempo que permaneció en las dependencias policiales de San Sebastián.

El juez Justo Rodríguez, titular del Juzgado de Instrucción número 2 de San Sebastián, ha sido acusado por Gestoras pro Amnistía de "torturador". Esta asociación, que defiende a los presos de ETA, acusa al juez del caso Elejalde, a los médicos forenses de los juzgados de San Sebastián y al decano del Colegio de Abogados de Guipúzcoa de favorecer que se torture en dependencias policiales.

Gestoras pro Amnistía asegura en una nota que los forenses "se convierten muchas veces en los principales soportes para garantizar la impunidad" de la tortura. Y añade que los médicos forenses no hacen caso de las denuncias y del estado en que se encuentran los presos en los calabozos.

El magistrado Justo Rodríguez ha sido objeto de varias campanas contra él por parte de los grupos próximos a ETA. En octubre de 1995 aparecieron en las calles de San Sebastián carteles en los que se le tachaba de "perro, antivasco y españolista" y se le conminaba a abandonar el País Vasco. Rodríguez fue apoyado por la mayoría de sus compañeros del Palacio de Justicia de San Sebastián.

Ertzainas alertados

Por otro lado, el Departamento de Interior del Gobierno vasco ha aconsejado que se extremen las precauciones con los tres ertzainas cuyos números profesionales y Ficticios estaban incluidos en un documento secreto para declarar como testigos protegidos en un juicio sobre violencia callejera. El documento fue robado el pasado lunes de las dependencias de la Audiencia Provincial de Vizcaya.

Las mismas fuentes señalaron que, tras informar a los interesados de la desaparición del documento, la Consejería les ha solicitado que incrementen las medidas de seguridad que habitualmente adoptan los agentes de la policía vasca.

Los tres ertzainas debían declarar el próximo mes de junio en la vista oral que se celebrará en la Audiencia de Bilbao contra un acusado de participar en incidentes protagonizados por un grupo de encapuchados en el casco viejo de la capital vizcaína.