El patronato del Prado ultima las soluciones del plan museográfico

El pleno de esta tarde del patronato del Museo del Prado va a aprobar la redacción definitiva del plan museográfico propuesto por el director, Fernando Checa. Respecto al primer borrador, la zona del claustro de los Jerónimos no se dedicará a los fondos del XIX, que se mantienen en el Casón del Buen Retiro, y en su lugar estarán las salas de exposiciones temporales, taller de restauración, salón de actos y cafetería.

"Se ha terminado el perezsan chismo". Es la opinión de algunos de los 30 miembros que forman el pleno del patronato del Prado, al oponer el debate para concretar el plan museográfico a la actuación personal de Alfonso E. Pérez Sánchez durante su etapa en el museo, actual director honorario y patrono. El primer borrador del plan, redactado por el director, Fernando Checa, se ha discutido en dos plenos y tres permanentes.La comisión permanente es el órgano de decisión del museo junto con el pleno, según la normativa del Partido Popular al iniciar su legislatura. La permanente está formada por José A. Fernández Ordóñez (presidente) y José Manuel Pita; cargos de Cultura (Miguel A. Cortés y Benigno Pendás); del museo (Fernando Checa y Gregorio Moreno), y Rodrigo Uría, Alfredo Pérez de Armiñán, José Milicua y Julio López Hernández.

"El museo no ha sido nunca la persona del director", declaró ayer Pérez Sánchez, vinculado al Prado durante 28 años hasta su destitución en 1991. "Me han tocado situaciones esperanzadoras pero ahora no veo claras las cosas. Creo que nunca como ahora se nota la presión política del ministerio en el patronato, a pesar de que pueda parecer otra cosa".

Ordenación

El plan museográfico se concibe con áreas expositivas en el edificio Villanueva, con la colección permanente en una nueva ordenación cronológica. Como novedad, se incorpora la tercera planta, tras la reforma de las cubiertas, en los espacios administrativos, que supone 2.000 metros cuadrados, con pinturas del XVIII en la parte norte y la continuidad de Goya, y sus pinturas negras, en el sur. El actual Museo del Ejército recupera el salón de reinos y el Casón del Buen Retiro sigue con el siglo XIX, con nuevos sótanos para ampliar con 100 pinturas y 26 esculturas. Las áreas de servicios incluyen el edificio de oficinas, en Aldeasa, y una conexión subterránea que decidirá el proyecto entre los dos accésits del concurso del museo.