La fiscalía ve "muy probable" que un incendio en La Haya sea un atentado
El incendio en el que murieron una mujer turca y cinco de sus hijos y quedaron con graves quemaduras otros dos niños, ocurrido el miércoles en un barrio popular de La Haya, tuvo, "muy probablemente" un origen criminal, según aseguró el Ministerio de Justicia de Holanda. En un comunicado publicado el jueves, la fiscalía general de la capital holandesa dio a conocer que los investigadores de la policía científica habían hallado indicios de que el fuego fue provocado intencionadamente.La mitad de los miembros de una familia numerosa de inmigrantes turcos perdió la vida en el incendio: la madre y cinco de sus hijos, incluido un bebé e un mes y medio, que falleció en el hospital a consecuencia de las quemaduras que sufrió. Otros dos niños sufrieron heridas graves, mientras el padre y los tres restantes hijos del matrimonio lograron ponerse a salvo.
La policía de La Haya -que ha creado un equipo de 30 agentes para investigar los hechos entre los grupos xenófobos holandeses- no ha descartado que hubiese existido relación entre este siniestro y los dos ataques con cócteles mólotov ocurridos en el mismo barrio, contra un centro cultural azerbayano y una asociación turca, poco antes de que ardiera la casa de la familia turca.
Las autoridades holandesas, sin embargo, se han negado a facilitar más información sobre el supuesto atentado xenófobo "para no afectar a la marcha de las investigaciones". La policía ha detenido ya a cinco hombres, con edades comprendidos entre los 26 y los 37 años, como sospechosos de haber arrojado botellas con líquido inflamable contra los locales musulmanes.
El padre de los niños relató a la prensa holandesa que había escuchado una fuerte explosión en plena noche y que, cuando salió a la calle, su casa ya estaba ardiendo. En medio del pánico, su esposa le arrojó a cinco de los niños por el hueco de la escalera. Pero el humo y las llamas impidieron que los padres completaran el dramático rescate. El fuego atrapó a la mujer y a los otros cinco niños y arrasó la vivienda, donde los bomberos encontraron más tarde los restos de un bidón, que presumiblemente contenía gasolina.
Centenares de ciudadanos, tanto holandeses como extranjeros, confluyeron a lo largo del jueves en el escenario de la tragedia: el barrio de los Pintores de La Haya, donde viven numerosos inmigrantes. En silencio, desfilaron ante la casa carbonizada de la familia turca, donde depositaron ramos de flores.
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