El juez pone en libertad provisional a los 'okupas' tras dos noches en el calabozo

A siete jóvenes extranjeros detenidos la policía les ha abierto un expediente de expulsión del país, según la agencia Efe. Para dos de ellos, procedentes de fiscal países no comunitarios, el a pidió ayer su ingreso en el centro de internamiento de extranjeros de Moratalaz.A lo largo de la jornada se concentraron ante los juzgados de la plaza de Castilla más de trescientos amigos y familiares de los detenidos. Un grupo de padres afirmó que están estudiando presentar una denuncia contra la policía y la Delegacion del Gobierno por lo que consideran un arresto ilegal de los jóvenes y por los malos tratos policiales que éstos han expresado en sus declaraciones ante el juez. En el mismo sentido se manifestó el abogado Endika Zulueta, habitual defensor de okupas.

Durante todo el día los manifestantes profirieron gritos contra los agentes que vigilaban la zona tachándoles de "asesinos" y "torturadores.". También, a media mañana, un grupo de jóvenes apareció por el lugar vestidos de diablos y gritando "Aquí están los hijos de Satán", en alusión al comentario del concejal del distrito de Salamanca, Fernando Martínez Vidal, sobre que en La Guindalera, el edificio vacío desde hace quince años y okupado desde hace uno, se celebraban "fiestas satánicas". A la una de la madrugada la tensión creció entre los congregados al aparecer varias furgonetas de la policía y descender estos equipados con material antidisturbios.

Jorge Guevara, un funcionario del Ministerio de Agricultura de 59 años, es padre de uno de los jóvenes arrestados. "Yo he votado al PP y soy simpatizante de ese partido, pero creo que con esto se han pasado un poquito, parece que han convertido este asunto en una cuestión política, si no, no se entiende algo tan masivo", afirma. "No me parece bien que los chicos entren en propiedades privadas pero también es verad que tienen problemas para conseguir viviendas",concluye.

Marisol, de 47 años y madre e otro joven, cree que se ha querido dar un escarmiento. "Hay gente interesada en asimilar okupación e insumisión con terrorismo porque les molesta que los jóvenes se organicen de una forma distinta. Madrid está lleno de edificios vacíos y sólo interesan cuando los jóvenes entran a ellos para organizar actividades", concluye.