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Formado el jurado del 'caso Itsasondo' tras más de cuatro horas de deliberación

Aurora Intxausti

El juicio contra Miguel Otegi Unanue, el militante de Jarrai de 23 años que mató a dos miembros de la Ertzaintza en un caserío de Itsasondo (Guipúzcoa), comenzó ayer en San Sebastián tras elegirse el jurado, compuesto por ocho mujeres y un hombre. El jurado, más dos suplentes, quedó formado tras cuatro horas y media de deliberación y tres sorteos, ya que las partes personadas agotaron las posibilidades de recusación de candidatos.

Los 25 seleccionados se personaron en la mañana de ayer en las dependencias del Palacio de Justicia de San Sebastián para que las distintas partes del proceso elegiesen a las once personas, nueve titulares y dos suplentes, que van a Juzgar a Otegi.La circunstancia de que Otegi milite en Jarrai (rama juvenil de la coordinadora KAS), provocó que, la izquierda independentista intentara presentar el doble crimen como un resultado del acoso al que, en su opinión, la Ertzaintza somete a los jóvenes del entomo abertzale. De los 36 candidatos iniciales para el jurado,19 presentaron alegaciones para no formar parte del tribunal.

El sorteo tuvo que realizarse tres veces debido a que tanto las acusaciones como la defensa utilizaron la posibilidad de recusar a cuatro candidatos. Finalmente, el jurado quedó integrado por ocho mujeres y un hombre, quienes a lo largo de 15 días y tras escuchar las declaraciones de testigos, peritos e informes de las partes deberán dictaminar sobre la culpabilidad o no de Otegi.

Durante la selección del jurado, el juez y las partes han llegado a un acuerdo de discreción sobre sus integrantes. El presidente de la Sala que juzgará el caso, José Luis Barragán, ha prohibido el acceso de las cámaras al edificio de la Audiencia donostiarra para preservar el anonimato del jurado.

Por la tarde, en el juicio, Otegi, aseguró que disparó contra los agentes Iñaki Mendiluze: y José Luis Villanueva debido al acoso, la persecución y el hostigamiento al que le sometía la Ertzaintza. El acusado, quien dijo que no conocía a sus víctimas, apenas recuerda nada de lo que ocurrió durante la noche anterior al doble crimen y los momentos posteriores a las muertes de los agentes.

El 10 de diciembre de 1995 y tras una noche de juerga en la que consumió muchas cervezas, Otegi disparó con una escopeta de caza contra dos ertzainas de una patrulla que se acercó hasta el caserío Oteizabal de Itsasonso. Otegi manifestó que antes de disparar discutió con los ertzainas pero no recuerda de qué ni sobre qué. Posteriormente, Otegi se dirigió al coche patrulla, cogió la radio y dijo: "un casero ha matado a dos cipayos por la política que lleváis".

El fiscal pide 26 años y cuatro meses de cárcel por cada asesinato, petición que la acusación particular eleva a 30 años. El abogado de Otegi, Miguel Castells, pide la absolución o, subsidiariamente, ocho meses de prisión por cada homicidio, y mantuvo ayer que su cliente sufría un transtorno mental transitorio y que se sentía acosado por la Ertzaintza.

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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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