El vecino muerto de un tiro por un policía municipal empuñaba un arma de fogueo
José de la Cruz Pozo,- de 34 años, empuñaba un revólver de fogueo cuando el pasado jueves un policía municipal le mató de un tiro a la puerta de su casa, en el distrito de Tetuán. El agente, que ayer pasó a disposición judicial, efectuó el disparo cuando procedía a detener a De la Cruz, quien momentos antes había protagonizado un altercado en la calle. Tanto el alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, como la oposición expresaron su apoyo al policía detenido.
Un portavoz de la familia de la víctima manifestó anoche en el tanatorio que están "a la espera de que el juez aclare lo ocurrido. De todas formas los datos que se están ofreciendo sobre José no son ciertos", aducen. "No era ningún perturbado. Cuando su madre se enteró de la muerte, la policía le prometió que le iban a dar información. Pues bien, hasta ahora nadie ha informado de nada". De la Cruz era técnico en electrónica y sus compañeros de trabajo le consideraban una persona social y ordenada.La intervención policial que acabó con la vida de De la Cruz se inició pasadas las cinco de la tarde del jueves. De la Cruz, después de tirar sus enseres por el hueco de la escalera, había irrumpido en la vía pública con una escopeta de cañones recortados -descargada- y una pistola de avancarga. La Policía Municipal logró reducirle y desarmarle, Al poco tiempo, sin embargo, el hombre se zafó de los agentes y consiguió volver a su vivienda, en el número 35 de la calle de San Raimundo. Su captura quedó encomendada a otros dos policías municipales. Éstos' entraron en el edificio donde se había refugiado De la Cruz y le descubrieron en la planta baja. Un testigo consultado por este periódico afirmó que uno de los agentes pidió a De la Cruz que se sentase, pero éste, nervioso, se negó. Justo después empezó a subir las escaleras [vivía en el segundo piso] seguido de un agente. "El chico iba desarmado. Yo me salí a la calle y después oí un disparo", dijo este testigo.
La policía sostiene que De la Cruz, al subir, se hizo con el revólver y, tras una serie de amenazas -"Voy de coca hasta el culo", afirma la policía que gritó-, les encañonó. Uno de los policías respondió con un tiro.
Fuentes de la investigación señalaron que la actuación del agente, que ingresó en la Policía Municipal en 1994, fue correcta en la medida en que respondió a una amenaza. "Le apuntaron con un arma, y él no podía saber que era simulada", afirmó una fuente. La policía, con todo, no especificó dónde recibió De la Cruz el impacto de bala.
Los sanitarios del Samur que certificaron su muerte, sin embargo, advirtieron que tenía un orificio en la nuca. Tras el disparo, el agente, que tiene 26 años, fue detenido y conducido a las dependencias de la Brigada Provincial de Policía Judicial, donde prestó declaración. En la tarde de ayer fue puesto a disposición judicial.
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