La ofensiva del Ejército causa más de 160 muertos entre los islamistas argelinos

Más de 160 guerrilleros integristas han muerto en los últimos días en Argelia, como consecuencia de una ofensiva generalizada lanzada en diferentes frentes por el Ejército, en aparente respuesta a los ataques fundamentalistas efectuados durante el pasado mes del Ramadán, que provocaron más de 400 muertos.El número más importante de bajas islamistas ocasionadas por esta nueva ofensiva de los militares se ha registrado en las regiones vecinas del Gran Argel, donde las tropas regulares operan en coordinación con los grupos de voluntarios civiles, pagados y armados por el Ministerio del Interior, perfectos conocedores de la zona y de sus habitantes.

Sólo en la región de Medea, situada a poco menos de un centenar de kilómetros al sur de Argel y considerada uno de los feudos integristas más importantes del país, el Ejército y los grupos civiles abatieron la semana pasada a un grupo de 63 guerrilleros islamistas, según aseguraba en su edición de ayer el periódico independiente El Watan.

El Ejército regular trata también de limpiar los baluartes integristas diseminados por la gran llanura de La Mitiya, a pocos kilómetros del centro de la capital, la cual se encontraba ayer al mediodía cercada por las fuerzas de seguridad, según aseguraron vecinos de la zona. Los primeros recuentos oficiosos anuncian la muerte en esta región de al menos una veintena de islamistas.

Otro campo importante de operaciones del Ejército lo constituyen las provincias cercanas a la frontera con Marruecos, como las de Sidi Bel Abbes, Tlemcén y Saida, situadas a más de 500 kilómetros al suroeste de Argel, donde se había registrado en los últimos meses una reactivación importante de los grupos guerrilleros islamístas que controlaban la circulación de las principales carreteras.

Los observadores políticos y diplomáticos consideran que esta ofensiva lanzada por las tropas del general Mohamed Lamari tiene como principal objetivo "tranquilizar y pacificar el país", para permitir así la celebración de las elecciones legislativas, que serán convocadas antes del verano. Una operación similar se registró en Argelia en el otoño de 1995, pocos meses antes de que se convocaran las elecciones presidenciales.

Pero estas operaciones militares no han logrado aún silenciar a los grupos rebeldes, supuestos responsables de la colocación de una bomba en. el mercado principal de Bugara, situado a unos 30 kilómetros al sur de Argel, que ha causado dos muertos.