Aznar reitera a patronal y sindicatos que hará la reforma laboral si fracasa la negociación

El Gobierno mete prisa a patronal y a sindicatos en sus negociaciones para la reforma laboral. El presidente del Ejecutivo, José María Aznar, que clausuró ayer un seminario sobre el empleo organizado por el Ministerio de Trabajo, advirtió que si los agentes sociales no alcanzan un acuerdo, el Ejecutivo "no podría dejar de dar respuestas a las reformas laborales" que la sociedad demanda. "Si el Gobierno quiere intervenir en las negociaciones con la patronal, que deje de utilizar a intermediarios y diga claro cuál es la reforma que quiere hacer", replicó Antonio Gutiérrez, secretario general de CC OO.

, "La reforma laboral es urgente", afirmó ayer Aznar, que expresó su confianza en que "en pocos días" los interlocutores sociales alcancen "un buen acuerdo" que responda a las expectativas de la sociedad.Aznar subrayó que la reforma laboral es necesaria, pero no suficiente para generar empleo y urgió a que las partes encuentren puntos de acuerdo cuanto antes para salir de la incertidumbre. El presidente del Gobierno instó a patronal y sindicatos a "cumplir sus deberes, al igual que lo está haciendo el Gobierno".

Sin embargo, la organización empresarial CEOE y los sindicatos UGT y CC OO no parecen ponerse de acuerdo, ni siquiera para valorar la marcha de las negociaciones. Para los líderes de los dos sindicatos, "las negociaciones están estancadas y es imposible el entendimiento mientras la patronal no intente más que aumentar la precariedad en el empleo y abaratar el despido".

En cambio, José María Cuevas, presidente de CEOE, no lo ve tan mal. El Patrón de patronos afirmó que la negociación no está bloqueada, "aunque pasa por un momento difícil". Cuevas insistió en la necesidad de realizar una reforma estructural, al tiempo que mostró su preocupación por las recetas "milagrosas", de los sindicatos, en referencia a las propuestas sobre reparto del empleo.

Cuevas recordó que la tasa de paro en España duplica la media europea e hizo referencia al examen que la economía debe afrontar para entrar en la moneda única. Para salir del paro endémico, añadió, sería necesario crear 400.000 empleos al año hasta el 2001. Aznar dió la misma cifra, pero elevó el periodo hasta el 2003.

Gutiérrez y el secretario general de la UGT Cándido Méndez, afirmaron que en caso de que no se llegue a un acuerdo en las negociaciones con la patronal mejor sería que el Gobierno renunciara a una reforma laboral por ley, "porque no es un elemento exclusivo para crear empleo".

Al margen de la polémica, el secretario general de Empleo, Manuel Pimentel, aseguró ayer que el Gobierno prevé la creación de 237.000 nuevos puestos de trabajo durante 1997.

El consejero de Trabajo de la Generalitat, Ignasi Farreras, defendió en el Parlamento catalán que las empresas puedan contratar trabajadores con sueldos diferentes para las mismos tareas como medida de "discriminación positiva" y "fomento del empleo".